Después de la separación de Raw Alejandro y Rosalía —aunque ya nos enteramos del chisme y todo lo que pudo haber sucedido con la pareja— no creemos que el timing sea coincidencia y te contamos por qué: la cuffing season y su final es la razón por la que todos cortan en verano.
Shawn y Camila, Kim Kardashian y Pete Davidson, Selena y Justin o Miley y Liam… ninguna de estas parejas sobrevivió al verano y hay una explicación muy lógica para ello.
¿Alguna vez has notado que, así como todos (famosos o no) empiezan a encontrar pareja por ahí a finales de otoño, en verano es todo lo opuesto? Claro, las altas temperaturas no es lo único que calienta las cosas en una relación, pero los días más soleados y largos en verano pueden ser la chispa que haga que la bomba explote.
Cuándo acaba la cuffing season y por qué las parejas cortan en verano
Días radiantes, tardes casi eternas, noches calurosas… ¿quién no desearía tener un summer love por lo menos una vez en la vida? Crecimos con nuestras chick flicks favoritas, donde el amor surge cuando los protagonistas se topan en las vacaciones de midterm, en la playa, en la feria de verano o literalmente cualquier setting que exclame “temporada estival”. Pero en la vida real, la mayoría de historias que escuchamos se conjugan con “cortamos” y este patrón, que se presenta a finales de primavera y días de verano, se ha vuelto evidente.
Mientras se ha comprobado que en otoño las personas inconscientemente se preparan para el invierno y buscan una pareja para celebrar las fiestas y pasar juntos el frío (“cuffing season”), en verano es todo lo opuesto cuando el ciclo de invierno termina y vuelves a liberarte de tener un compromiso (“anti-cuffing season” o “storming”): las redes sociales comprueban que las frases relacionadas a “breakup” o “broken up” aumentan. En las tardes de agosto reina la soltería y es porque, precisamente, es momento de salir, divertirse y conocer a otras personas.
Esto está directamente relacionado con los efectos de las temporadas en nuestro cuerpo. “Cuando hay una disminución de la luz solar, el cuerpo produce más melatonina (una hormona que responde a la oscuridad y te cansa) y menos serotonina, el neurotransmisor que nos hace sentir felices y bien. Pero a medida que sale más luz solar, el cerebro produce menos melatonina y más serotonina, lo que te hace sentir más feliz y es posible que no sientas la necesidad de estar cerca de otra persona para brindarte esa sensación de seguridad y felicidad”, según la psicóloga Dr Danielle Forshee.
Las razones principales para terminar en verano
Verano: una bomba de tiempo
Ya sea antes de comenzar las vacaciones o justo después, se ha comprobado que el número de divorcios y separaciones se incrementa más que en cualquier otro momento del año. Y esto puede tener raíz en diversos conflictos que salen al aire cuando pasas mas tiempo con tu pareja en estas fechas.
Mientras se acercan vacaciones es una bomba de tiempo hasta que llega verano. Por eso dicen que en los últimos días de primavera, verano no es lo único que está a la vuelta de la esquina… tal vez también el fin de tu relación.
Conflictos familiares
En las vacaciones de verano se dan otros conflictos familiares cuando en esta temporada procuras estar rodeado de tu familia, ya sea con más comidas y reuniones en el jardín o un viaje en conjunto. Y aquí afloran problemas al estar mucho más cerca del suegro, la suegra o los cuñados… sabemos que entre menos gente a nuestro alrededor más tranquilas son las cosas siempre.
Las expectativas matan
El otro problema típico es cuando tú o tu pareja mantiene sus expectativas de verano demasiado altas. Y es que es muy común cuando nos la vivimos viendo la vida de otros en la pantalla de nuestros teléfonos: viajes espectaculares, cenas hiperrománticas, embarazos, casas nuevas, etc.
O de nuevo, las chick flicks con las que crecimos pueden hacer que nuestra expectativa provoque desacuerdos. Puede ser que tu pareja tenga una idea muy diferente a la tuya respecto a los planes para esta temporada.
Crisis personal
Por último, cabe decir que este fenómeno solo afecta a las parejas que estaban destinadas a arder, muchas de ellas: las que empezaron por este deseo invernal de salir del aburrimiento y depresión de los días fríos y nublados. Si esto te suena familiar, cuida que verano no se vuelva la razón en la que tu pareja o tú sean lo que “te detiene” al otro para cumplir con las expectativas de verano (muchas veces medio irreales, por cierto).
Si él o ella te hacen sentir como que se están perdiendo la mejor época del año para estar solteros y quieren salir a experimenta en la temporada que les promete conocer a más gente y más diversión, ahí no es. Y ojo, puede que regresen en invierno (como círculo vicioso). Pero si este no es el caso, una relación sana y fuerte no empeora con verano, sino todo lo contrario.
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