Elegir el anillo de compromiso perfecto es un evento importante. No es solo un símbolo de amor y compromiso, es una pieza de joyería destinada a durar toda la vida. Con tantos factores a considerar, desde el corte del diamante hasta el estilo de la alianza, el proceso puede ser a la vez emocionante y abrumador.
Por eso hoy te guiamos a través del arte de seleccionar un anillo de compromiso. Hablamos con dos expertos para obtener sus opiniones y consejos sobre cómo elegir el anillo adecuado para ti, ya sea que desees un solitario clásico, un óvalo moderno o algo intermedio, aquí tendrás toda la info que necesitas.
Las 4 C de los diamantes para elegir el de tu anillo de compromiso
Cuando se trata de diamantes, necesitarás conocer las 4C, un conjunto de cuatro características esenciales que se utilizan para evaluar y calificar la calidad de un diamante. Para cada una de las 4C (corte, claridad, color y carats, o quilates) hay ciertos criterios que se deben buscar y la combinación de cada uno de los factores ayuda a determinar el valor del diamante.
Corte
El término “corte” se refiere a la forma de un diamante. Algunos de los cortes más populares incluyen redondo, ovalado, esmeralda, solitario o princesa, pero existe una gran variedad de cortes únicos que puede encontrar al comprar el anillo de sus sueños.
Si bien hay cortes más valorados (como el redondo), cuando se trata de corte, siempre debes considerar tu estilo personal, dice Kristina Buckley Kayel, directora del Natural Diamond Council. Es posible que tengas una forma preferida según tu gusto o que desees elegir un estilo que se adapte bien a la forma de tu mano.
Buckley Kayel nos cuenta que las piedras de las familias ovaladas y en forma de pera pueden alargar los dedos, y para quienes tienen manos más pequeñas, una forma mínima de diamante lucirá más proporcionada al dedo.
Color
Cuando se trata del color de un diamante natural, más bien hablamos de falta de color: cuanto más cercana a incolora está una piedra, más rara y valiosa es. Con la mayoría de los diamantes, es posible que no puedas identificar fácilmente su color.
“Para el consumidor medio, la mayoría de los diamantes naturales parecen incoloros”, explica Buckley Kayel. En realidad, suelen tener ligeros tonos amarillos o marrones. El Instituto Gemológico de América tiene un espectro de colores estandarizado que clasifica el color de un diamante, siendo D el estándar más alto de incoloridad: los diamantes D—F son incoloros; Los diamantes G—L son “casi incoloros”; y los diamantes M—Z tienen rastros de color.
Claridad
Este término se refiere a la ausencia de las inclusiones naturales que se formaron en ellos hace miles de millones de años. “Los diamantes naturales que no tienen inclusiones son extremadamente raros y se consideran impecables”, dice Buckley Kayel. “Constituyen algunos de los diamantes naturales más valiosos del mundo”.
Si bien en términos de valor monetario, las inclusiones pueden reducirlo, también puede ser importante recordar que la mayoría de los diamantes tendrán algún tipo de inclusiones, y pueden ser una característica que haga que un diamante sea más distintivo, al igual que cada huella digital es única.
Carats o peso en quilates
La ‘C’ final de las cuatro es el peso en quilates, que se refiere al tamaño de un diamante. En EE. UU., el tamaño promedio de un anillo de compromiso es de un quilate, pero elegir el tamaño de diamante adecuado para ti puede depender de una variedad de factores, incluido el presupuesto y el gusto personal.
Buckley Kayel recomienda probar una variedad de tamaños. “Puedes pensar que sabes cuántos quilates quieres y luego darte cuenta de que quieres algo más pequeño o más grande una vez que te lo pruebas”.
La montura del anillo
Una vez que haya elegido un diamante según los criterios anteriores, querrá considerar cómo colocarlo en un anillo de la manera que prefiera.
Grant Mobley, experto del Natural Diamond Council dice que las opciones son casi ilimitadas, pero para comenzar estos son algunos términos que te pueden ayudar.
Por ejemplo, las clavijas son la manera en la que tu diamante se fija al anillo, las piezas de metal que se agarran a la piedra para colocarlo en su lugar. La mayoría de los anillos se colocan usándolas, y es una técnica que se ha usado por miles de años.
Cuando no se usan clavijas, otra opción es un borde de metal que rodea la piedra. Este es mas fácil de limpiar, pero permite menos entrada de luz. También se usan halos de otras piedras para rodear el diamante principal (como en el famoso anillo de la princesa Diana).
Cómo elegir el tamaño de un anillo de compromiso
Quizá ya sabes cuál es el tamaño de tu dedo anular (si no, es fácil averiguarlo en una tienda de joyería), pero la experta Buckley Kayel dice que hay algunos factores que debes tener en cuenta y que te lleven a decidirte por un anillo un poco más pequeño o más grande.
Si tu banda es un poco más cuadrada, quizá sea necesario hacerla más grande para que pase por los nudillos. Y si piensas usar tu anillo de bodas u otras bandas en el mismo dedo, también hay que considerar cómo encajarán. Y si tiendes a hincharte, piensa que necesitas que tu anillo siempre se sienta cómodo.
Cómo fijar un presupuesto
A pesar de lo que diga la cultura popular, ninguna cantidad fija de salario o valor en dólares es universalmente apropiada para gastar en un anillo de compromiso.
“La gente sólo debería gastar aquello con lo que se sienta cómoda”, dice Mobley. “Le recomiendo que tenga en cuenta sus ingresos, sus objetivos de inversión futuros, sus ahorros y sus deudas al calcular su presupuesto. Si planean comprarlo como pareja, las conversaciones también deben ser compartidas”.
Para la mayoría de las personas, el plan es comprar un anillo de compromiso y conservarlo por el resto de sus vidas, e incluso heredarlo. Pero si crees que podrías querer mejorar tu anillo a lo largo de los años, puedes considerar que se ha demostrado que los diamantes naturales se aprecian un 3% anual, según Mobley.
Nota original: Instyle.com
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