¡Blake Lively y Ryan Reynolds celebraron su aniversario en un lugar muy especial al que Blake llevó un vestido de polka dots que tienes que ver!
Han pasado 10 años desde que Blake Lively y Ryan Reynolds tuvieron su primera cita, y una década después no ha cambiado mucho. La ciudad, el restaurante, las bromas juguetonas, todo ha permanecido igual. Para celebrar su hito especial, la pareja recreó su reunión inicial en 2011 en un restaurante de Boston y, por supuesto, se tropezaron en el proceso.
En el Instagram de Ryan, compartió una selfie de la pareja afuera del bar de sushi, escribiendo: “Nuestro restaurante favorito con su cuarta cita favorita”. Y aunque este post parecía ser de lo más normal, el actor tuvo que incluir una broma (obviamente) para presumir los pendientes de Blake en el post.
“Publicando esto de nuevo porque corté los lindos aretes de mi esposa. Ella me entrenó mejor que esto”, escribió sobre su propio rostro, y agregó: “Lo siento si decepcioné a alguien”.
Blake respondió bromeando: “Eso es correcto”.
Sobre el vestido de polka dots de Blake
Además de las increíbles joyas de Blake, usó el vestido de polka dots perfecto para la cita, y dejó la fila inferior de botones sueltos para un corte alto de bricolaje. “Diez años después. Todavía salimos en nuestra ‘primera cita’. Pero con zapatos mucho más cómodos “, escribió Lively junto a una toma de cuerpo entero de ella y Ryan, quien combinó un botón azul con jeans y unos sneakers.
La relación de Blake y Ryan
Blake y Ryan se conocieron por primera vez en el set de Green Lantern en 2011, y en una entrevista reciente, Ryan bromeó diciendo que dio el primer paso. “Conocí a Blake en el pliegue más oscuro del ano del universo llamado Green Lantern”, dijo durante una aparición en el podcast SmartLess. “Éramos amigos y aproximadamente un año y medio después tuvimos una cita doble, pero estábamos saliendo con personas distintas”.
La pareja se mantuvo en contacto antes de reunirse, según Reynolds. “Lo siguiente que pasó es que ella iba a Boston, yo iba a Boston y le dije: ‘Bueno, iré contigo’. Nos subimos al tren y viajamos juntos “, dijo, y agregó:” Solo le estaba rogando que se acostara conmigo “. Una semana después, él mencionó la idea de comprar una casa juntos, y lo hicieron.
El resto, como dicen, es historia.
Nota original: InStyle.com
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