MAZ: la marca colombiana que tu clóset necesita
Moda

MAZ: la marca colombiana que tu clóset necesita

“Hecho a mano” y “sostenible” son parte esencial de una marca, cuyos diseños te hipnotizan como amor a primera vista… y la mejor parte de MAZ, la marca de moda lenta por Manuela Alvarez, es que las piezas statement (y atemporales al mismo tiempo) pueden tener un impacto social positivo y verdadero. Te contamos todo sobre esta marca: su historia y la visión de su creadora.

Como un puente que acerca la moda a la maestría artesana para narrar historias con una sofisticación irresistible, esta marca multicultural de slow fashion colombiana aprende del pasado para tejer el futuro. Mientras la colaboración es el generador de cambio, escuchando a otros es como la irreverencia ha encontrado voz propia.

“El respeto al medio ambiente,a las personas y a las tradiciones no debería ser un valor agregado, sino el mínimo”. A un mes de irse a Nueva York invitada por la ONU como speaker de moda sostenible, Manuela nos platica de su más reciente colección. “Es un homenaje a las manos artesanas de Cundinamarca; una oda a complejidades humanas que hacen eco con las de ecosistemas”. 94 artesanos (80% mujeres, hombres de la comunidad LGBTQI+ y adultos mayores) narran la historia de Oda Andina con texturas hipnotizantes. 

Tejido en telares (verticales, horizontales y egipcios), bordado a mano, moldeado de cuero, cerámica y vidrio… más de 20 técnicas ancestrales han sido huella de 780 familias artesanas de siete regiones de Colombia, en colecciones co-creadas con MAZ. Pero la marca no se resume en números, porque su ADN está en lo no cuantificable: la conexión con las personas, la naturaleza y, sobre todo, con uno mismo. 

Lo que inició en el 2013 con una diseñadora que regresaba de Milán a Bogotá, para combinar sastrería clásica con la curiosidad por sus raíces, evolucionó con un proyecto en una de las regiones más afectadas por guerra y pobreza: Quibdó Chocó. “Cambié el modelo de negocios, 90% de nuestras colecciones podrían involucrar a grupos vulnerables: mujeres cabeza de familia, comunidades de artesanos y víctimas del conflicto armado”.

Al encontrarse con una riqueza de saberes que se estaba perdiendo, nació un propósito, y lo empresarial pasó a ser un proyecto de vida. “Se convirtió en mi vocación viva, llevándome a entender a mi generación; a repensarme y encontrar mi voz como individuo y mujer mestiza latina”. 

Hoy, el creador que trasciende entiende que lo local impacta lo global y que la moda honesta funciona en un intrincado tejido. Conceptualización ilimitada y una ejecución regida por metodología absoluta: este binomio sartorial genera, como diría Manuela, “una poderosa fusión que oscila entre la sofisticación universal y la mística del saber ancestral”. La sostenibilidad es el hilo conductor: “hacemos pocas unidades o bajo pedido; brindamos trabajos estables; manejamos inventario limitado de tela; utilizamos procesos y materiales de alta calidad; usamos piezas sobrantes para crear”. 

Pero el cambio no termina aquí. Desde 2017, Manuela asesora para impulsar marcas, artesanos y grandes proyectos con el gobierno colombiano. “El mundo está mirando a Latinoamérica como fuente de creación y producción. Desde el tropical chic hasta el diseño de autor, estamos siendo conscientes de nuestra riqueza desde la diversidad”.

¿Y qué sigue para MAZ? “Con los increíbles grupos que hemos trabajado y otros que florezcan, seguiremos como un laboratorio creativo con impacto cultural y social… un referente del lujo en Latinoamérica y el mundo”. Y sí, el reto es el motor: “Me inspira la irreverencia de decir ‘esto no lo ha hecho nadie, ¿cómo lo logramos nosotros?’”.

Explora más en: Instyle.mx