Maria Grazia Chiuri sabe que son innumerables los artistas que han usado a México como punto de partida para su obra. Se han escrito ya muchísimas cosas sobre nuestro país como musa y cómo en ocasiones esa inspiración se ha convertido en saqueo, pero para ella, hacer un desfile de Dior en México y colaborar con artesanos no es una idea aislada o superficial. Es una continuación de su interés por el trabajo manual, por el arte y por la capacidad que tiene la moda para expresar nuestro ser más íntimo.
En rueda de prensa este jueves 18 de mayo en el anfiteatro de San Ildefonso, la Directora Creativa de Dior habló sobre el desfile que presentará el sábado 20 en ese mismo icónico espacio. Al escucharla, la colección Resort 2024 parece una conclusión totalmente lógica, aunque por supuesto más bien es una consecuencia de sus intereses únicos, su punto de vista y los momentos de su vida que la han marcado: desde estudiar Historia del Arte con un libro que no incluía a una sola artista mujer hasta crecer en una familia experta en costura, comenzar su carrera en una Italia donde poco a poco se fueron perdiendo los conocimientos artesanales y finalmente el conocer la relación de Frida Kahlo con los textiles al visitar la exposición curada por la mexicana Circe Henestrosa, con quien colaboró en esta colección.
Lo que subraya en la conferencia es que cada persona, aunque no sea líder en una de las casas de costura más famosas del planeta, tiene estas mismas historias, marcadas por momentos sumamente personales a los que podemos hacer alusión con nuestro propio y único sentido del estilo: “la moda es parte de nuestro lenguaje y definirnos a nosotras mismas es importante”, explicó Maria, y elaboró en su filosofía como diseñadora:
“La colección es mi punto de vista, pero cada mujer debe poder elegir una pieza que vaya con su estilo, mezclarla, usarla a su manera, yo no quiero imponer nada. Mi trabajo es lograr el fit, que te sientas bien con la ropa, porque las prendas son la casa del cuerpo y deben ser cómodas”.
Por qué Maria Grazia admira a Frida
Es aquí donde entra Frida Kahlo, la artista que ya no necesita apellido, cuya imagen ha sido reinterpretada al cansancio, cuyas palabras son status de Facebook, separadores de libro y recordatorios de superación. Y aún así la realidad de su arte, y de la vida que vivió con tanta intención y desafío siguen dando para más. Lo que le interesa a Maria es que la artista femenina más famosa del mundo: “tuvo una idea de sí misma inmediatamente” y la comunicó todo el tiempo: con su vestimenta, sus poses, la decoración de su hogar, sus palabras y su manera de estar en el mundo.
“Frida se creó a sí misma, no aceptó límites y fue una precursora para todas nosotras. Los temas de los que hablamos ella ya los había entendido hace cien años. Puso su cuerpo en absolutamente todo lo que hizo”, dice la diseñadora. Además, se identifica con la importancia que le dio la artista a los oficios y la artesanía, en cómo los incluyó en su proceso creativo.
Desde su posición en Dior, Maria Grazia Chuiri busca rescatar la artesanía textil y darle la misma importancia que al trabajo creativo, colaborando y generando oportunidades para que los maestros artesanos vean nuevas avenidas: “es importante proteger, pero también tener una idea para el futuro”, afirma. Cómo será ese futuro es donde entramos en polémica: por supuesto que las habilidades de expertos en nuestro país no necesitan la validación de una casa europea, pero a nivel global sí es importante que las artes no tengan una escala de importancia, que exista una variedad de conversaciones y de avenidas para las nuevas generaciones.
El 20 de mayo veremos una colección contemporánea de Dior, con colaboraciones de las que todavía no tenemos detalles, pero sabemos que habrá interpretaciones de clásicos de la casa, como la bar jacket o la bolsa Lady Dior por parte de artesanos de diferentes regiones de Puebla, Chiapas y Oaxaca. Es, por supuesto, imposible que las piezas de Dior Resort 2024 nos hablen de la totalidad de México, un país multicultural y plurinacional. Lo que veremos será el destilado de muchas ideas y de realidades muy específicas que, como cualquier pieza de arte, no agradarán a todos y, como cualquier producto comercial, tendrán muchos intereses detrás.
Mientras tanto, Maria ya cumplió un sueño que formuló desde que fue nombrada Directora Creativa de Dior en 2016 y al que todavía no puede darle un peso: “solo entendemos la importancia de las cosas cuando vemos hacia atrás, y ahora sigo adentro”, dice sobre su experiencia.
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