By Xan: esta marca colombiana convierte frijoles en piezas de arte
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By Xan: esta marca colombiana convierte frijoles en piezas de arte

¿Qué tienen en común diseñadores, chefs y artistas? A simple vista pareciera que no mucho, pero hay una razón (o alimento) por la que todos están obsesionados con esta marca y todos convergen en la cuenta de Instagram de By Xan, una marca colombiana que cautiva con diseños que honran al frijol y busca enaltecer su valor mucho más allá de lo nutricional.

Hemos visto a marcas usar la naturaleza como medio de inspiración para sus piezas, pero pocas como estas que usan los frutos de la naturaleza para crear arte, más en específico joyería. ¿Cómo es que ha logrado convertir algo que siempre estuvo a simple vista en un objeto de deseo? El secreto está en mirar la belleza con otros ojos.

by Xan Colombia

¿Cómo surgió by Xan?

Durante un viaje a Portugal, Xandra Uribe se topó con una mujer que atesoraba una colección de rubíes, esmeraldas y onix. Y aunque no era una caja de piedras preciosas exactamente, la colección de frijoles que tenía enfrente se convirtió en diamantes ante sus ojos: “A veces uno mira, pero no pone atención a lo que tiene a lado”. Regresó con un par de semillas a casa y fue así como
empezó a cosechar un jardín de joyas.

Esta última palabra comparte raíz con la palabra francesa joie, que viene de la alegría y resume a la perfección el sentir de la diseñadora al ver crecer estos pequeños frijoles. Lo que inició como adornos para rituales sagrados en las civilizaciones prehispánicas, fue lentamente domesticado para convertirse en un alimento básico en la dieta de todo latino, pero poco a poco se empezó a hablar de quien lo consumía de manera despectiva por los países del norte, un constructo que hoy busca erradicar Xan con su trabajo.

El Frijolatorio, un santuario y estudio creativo

Ya sea “frijolera” o “beanner”, hoy más que nunca se enorgullece de ser llamada de esta manera por su amor a estas semillas. Fue así como creó el Frijolatorio, un santuario donde cosecha, recolecta, diseña y conserva las joyas más especiales que crecen a su alrededor, un jardín del que aprende todos los días: “Si quieres desarrollar tu paciencia, debes tener uno. Nunca estás en control y no puedes predecir lo que va a pasar con la tierra, el clima o la lluvia”. Fundiendo oro en moldes de cera perdida (una técnica ancestral precolombina), crea pequeños frijoles dorados que se entrelazan en hilo de Cumare con algunas otras variedades como frijol cebra, dálmata o jade, que se pintan a mano por la naturaleza con intrigantes patrones.

by Xan marca colombiana

A través de su práctica, Xan ha logrado conectar con ambas connotaciones al crear sencillas piezas con solo un par de semillas que apelan a la belleza; mientras que otras, hechas por miles de frijoles y enroscados en forma de serpiente, se vuelven sublimes en su totalidad. Pero, más allá de la estética, esta legumbre podría significar nuestra reconciliación con la tierra y volver a conectar con nuestro origen: “El frijol es mi ikigai. Es un experimento escolar plantado en un algodón dentro de un frasco o un viernes de frijolada en casa de los abuelos. Es mi razón de ser y lo que soy”.

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