La marca de joyería Dezso, cuyo nombre se traduce a “deseo” en latín (y tiene a México en su ADN), trae a todas las fashion girlies obsessed.
A nosotras nos hizo darnos cuenta que no estamos listas para decirle adiós al verano. Y porque las sirenas ya tuvieron su momento en tendencia, es turno de las surfer girls y viajeras más icónicas: las hijas del sol que usan tobilleras con diamantes.
Hablamos con la directora creativa, Sara Beltrán, para descubrir más sobre la historia detrás de un homenaje a India y México, con piezas hechas a mano que sólo podrían pertenecer bajo el agua o en nuestros looks más fashion forward.
Entrevista con Sara Beltrán, creadora detrás de la joyería Dezso
En su mundo bohemio, tropical, colorido y ecléctico, la joyería para Sara es, en pocas palabras, “algo muy sofisticado”. Su primer acercamiento con esta pasión empieza desde que a los 5 años, junto con su hermana, jugaba con las piezas de su madre, siempre tan elegante.
Hoy, el amor eterno de Sara por el océano, la playa y la naturaleza sigue siendo un juramento de sal indestructible, como un diamante incrustado en un caracol de ónix. En este viaje, donde el mayor tesoro descubierto ha sido “(su) camino a crear la marca”, el mayor Dezso es: “Seguir creando, no hay límites”.
¿Cómo empezó Dezso?
Después de años en la industria como estilista, descubrió su obsesión por la técnica del carving cuando se mudó a India, un cambio radical para la nacida en El Paso que creció en Juárez. “En México empecé mi carrera con las pulseras tejidas en colores y en piel, así comenzó Dezso. Siempre he vivido el momento y disfruto mucho el proceso, entonces el reto más grande fue cuando me fui a vivir a India en 2008, 3 años de tiempo completo”.
“En India se trasformó mi carrera”. Inspirada por el universo marítimo, el art déco y sus viajes, Sara describe su proceso creativo como un treasure hunt. Todo empezó con tesoros recolectados en las playas de México que se volvieron joyas en Jaipur y, desde entonces, la conexión entre ambos mundos y culturas es el core Dezso. “Mi vida México-India representa mis dos mundos. Son países que tienen mucho parecido y de hecho, tengo un libro bellísimo de fotografía de dos décadas, que te enseña las similitudes entre ambos, se llama India, México: vientos paralelos”.
Dezso colabora con artesanos en India y México
Mientras ambas culturas se complementan, Dezso captura su herencia artesanal y “técnicas del viejo mundo” de la mano de artesanos talentosos de dos países. “Tengo 18 años trabajando con lapidarios, verlos crear me inspira muchísimo y cada vez que me siento con ellos me sorprenden; es lo que más me gusta de mi trabajo. También hacemos incrustación de piedra, con pinturas miniatura que se montan dentro de cuarzos”.
Desde piedras preciosas y semipreciosas talladas a mano en la Ciudad Rosa, hasta conchas y estrellas de mar para accesorios de casa con trabajo huichol… no hay dos piezas iguales (y no sólo porque sean hechas a mano).
¿Qué materiales se usan para la joyería Dezso?
Mientras Sara divide su tiempo entre sus casas de Nueva York, México y Jaipur —y viaja en busca de técnicas para incorporar a sus colecciones (siempre con tiempo para jugar tenis y desconectar)— ella selecciona cada piedra, cada coral fosilizado, cianita y rodaja de diamante polki. Por cierto, este último se usa en su estado natural sin tallar, mientras que los diamantes de talla rosa se cortan en numerosas facetas para maximizar el brillo.
Por su belleza hipnotizante, no es coincidencia que así sea el amuleto de la suerte de Sara: “si tuviera que quedarme con una sola joya sería mi diamante”. Aunque el elemento que más la representa es otro: “La repetición de aletas de tiburón está en todas las piezas, es mi forma”.
Ahora sabemos quién es la culpable de que el diente de tiburón que usábamos de chicas en la playa hoy sea nuestra aspiración máxima con oro rosado de 18k (“fue hecho especialmente para mí en Dezso, me tomé alrededor de ocho meses”) en un collar tejido como cuerda Kernmantle color neón. Con un accesorio como este, sientes que llevas el ADN Dezso en las venas: “sexy, fuerte y elegante”.
Sobre su nuevo showroom Dezso (joyería, diseño y otros tesoros)
Con piezas que representan la bella imperfección de lo extraordinario, Sara Beltrán nos cuenta cómo, desde que fundó la marca en 2006, el ADN permanece igual, pero su lenguaje evoluciona a un Dezso más sofisticado, elevado y definido.
“Recientemente, abrí mi galería by appointment en NY 510 Greenwich St. y me fascina, es como una extensión de mi casa”, nos platica Sara sobre la antigua sastrería de 55 metros cuadrados convertida en la tienda de Dezso, a un lado de su departamento.
Lleno de joyas, esculturas y piezas de interiorismo coleccionables, este lugar es una expansión de la marca y su homenaje al mar en texturas de ébano, ojo de tigre azul, ónix, plata, conchas y cristales. ¿Su elemento favorito? La lámpara que ilumina el showroom: de cuarzo con un peso de 120kg; Sara logró aquella forma de concha tallada a mano después de 10 días con ayuda del taller con el que ha trabajado durante 18 años en Jaipur.
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