Esta es la razón por la que NO debes colgar tus suéteres
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Esta es la razón por la que NO debes colgar tus suéteres

Organizar nuestro clóset de la forma correcta es una práctica que muchos subestiman. Aunque cada quién tiene una forma muy particular de hacerlo, puede que no todas sean la correcta. Ojo, no estamos aquí para juzgar a nadie, pero sí para darte un par de tips and tricks para acomodar la ropa de tu clóset en una forma que haga que su tiempo de vida sea más largo. Sí, hasta eso tiene todo que ver.

Bien dicen que no hay que juzgar un libro por su portada, pero cuando se trata del orden de un clóset, podemos asumir mucho de una persona. Por un lado tenemos a los Marie Kondos, adictos al orden que acomodan todo por categoría y color, y por otro lado los que convierten su clóset en un bote de ropa sucia gigante. Sea cual sea tu bando, seguir estos simples tips te puede ayudar a que tu ropa dure intacta mucho más tiempo.

Puede que la forma más lógica para evitar que la ropa se arrugue apretada dentro de un cajón sea colgarla en ganchos, pero la realidad es que no todas las prendas están hechas para guardarse así. Para poder entender qué prendas son mejores amigas del gancho y cuáles no, es importante saber los materiales de los que están hechas.

tips para el cuidado de tu clóset

Los tips de oro para el cuidado de tu clóset

En el caso de las prendas tejidas (como los suéteres o cárdigans) colgarlas como una camisa es un BIG NO, en especial si son de tejido grueso y pesadas. La forma en la que están confeccionadas, densidad y material (en su mayoría algodón o lana) las vuelve muy fáciles de moldear, lo que hará que se marquen las puntas del gancho o se cuelguen, haciéndose mucho más holgados y grandes de lo que son.

Lo ideal es doblarlos o colgarlos de la siguiente forma para que el peso de la pieza total se distribuya y no terminen deformándose:

Para las camisas aplica todo lo opuesto, al ser de un algodón tan delgado, lo más probable si las doblas es que al sacarlas vayan a tener todos los pliegues marcados y no queremos eso. Después de plancharlas, asegúrate de colgarlas cerrando el botón más alto del cuello para que mantenga su forma. Eso sí, evita saturar el espacio en tu clóset ya que pueden terminar por arrugarse entre sí.

¿Cómo elegir el gancho correcto?

Coleccionar ganchos de la tintorería, la tienda, o el que le robaste a una amiga tampoco es opción. Con tantas variedades y diseños puede ser confuso elegir el ideal, pero aquí se trata todo de funcionalidad. Puede que sean muy bonitos, pero no debes dejarte guiar por su diseño, sino por el material y forma según el uso que les darás en tu clóset.

Evita a toda costa los de plástico, ya que es mucho más probable que dejen marcada tu ropa. Los de madera son una gran opción para el cuidado de tu clóset, y son aptos para camisas ya que harán que se ve elegante y son duraderos, pero uno de los mejores tips es elegir los de terciopelo. Al contrario de los de madera, este material hará fricción con tu ropa evitando que se caiga si no la guardas abotonada; además de que no dejará marcas.

Mucho cuidado con los que son especiales para pantalón, ya que si son de plástico o goma puede que 1) hagan que se resbale tu ropa y 2) se quede marcada la línea, en especial para pantalones formales. Úsalos únicamente para tejidos más gruesos como el denim.

Cubrepolvo: verdad o mito

Muchos tenemos la costumbre de guardar la ropa de tintorería tal y como llega a casa: en un gancho de metal (NO) con el cubrepolvo de plástico (TAMPOCO). Aunque podría parecer que la estamos protegiendo de los terrores del exterior, la realidad es que estamos creciendo gérmenes en el interior. Sí, es util para transportarlas de regreso a casa, pero nunca debes dejarlas ahí durante mucho tiempo ya que se puede encapsular la humedad y generar hongos. Siempre déjalas respirar en cuanto lleguen a tu clóset.

Last but not least…

Si con el cambio de temporada también harás cambio de clóset y vas a guardar tu ropa de primavera durante mucho tiempo en una caja o maleta, aplica la técnica de Marie Kondo y guárdala enrollada en lugar de doblada, esto evitará que se queden marcadas las líneas de doblez por el polvo y después sea imposible sacarlas.

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