Muchas veces, nuestros trabajos pueden tener una gran influencia en cómo nos sentimos y nuestro bienestar en general. Si te ha pasado que te sientes muy abrumada con tus responsabilidades laborales, te contamos cómo puedes pedirle a tu jefe “un día de salud mental” en tu trabajo.
El 10 de octubre se celebra el Día Mundial de la Salud Mental y a veces, hay temas que se nos olvida platicar o sobre los cuales no podemos romper el estigma alrededor de ellos. El trabajo es uno de ellos. Hoy en día, tomarte un día de salud mental, no debe ser un tabú, al contrario, es algo necesario y que debe ser perfectamente entendible.
Las oficinas y los lugares de trabajo, deberían de empezar a impulsar este tipo de días. Si en la tuya, nunca se ha hablado del tema, sabemos que probablemente te ponga ansioso iniciar la conversación. Sin embargo, es un paso necesario, que por supuesto requiere mucho valor y que te puede traer grandes beneficios a ti y tus compañeros.
En instyle.com, platicaron con la psicóloga Jennifer M. Gómez y más expertos en salud mental, quienes les dieron sus mejores tips para tratar este tema e identificar cuando es realmente necesario pedir un “día de salud mental”.
Los beneficios de tomar un día de salud mental en tu trabajo
Darle prioridad a tu salud no solo implica salud física, sino que también la mental. No importa si necesitas un día libre porque tienes burnout, por problemas familiares, estrés, ansiedad o solo por cuidarte a ti misma, lo importante es que no te dé miedo pedirlo.
“Los días de salud mental son una estrategia en nuestro proceso de curación” dice Gómez. Además, a nivel práctico, son necesarios para mejorar la productividad. Si estás en un ambiente caótico, no puedes sentirte bien mentalmente hablando.
Cómo puedes pedir un día de salud mental en tu trabajo
En un mundo ideal, los jefes deberían dejar en claro que todos tienen derecho a tomarse un día de salud mental en el trabajo y que entienden que a veces no todos tienen la capacidad de trabajar al 100%, sin embargo, no en todos los lugares es así. Si este no es tu caso a continuación te daremos unos tips para que puedas pedir un respiro.
1. Planea lo que vas a decir
Puede parecer algo obvio pero la realidad es que no lo es. Piensa muy bien lo que vas a decir e incluso, si lo tienes que apuntar y leer, está bien.
“Es importante preparar lo que vas a decir antes de comunicarte con recursos humanos o tu supervisor“, dijo la activista de salud mental Dior Vargas. “Es importante tener la mentalidad de que mereces un día de salud mental si te sientes abrumado. También ayuda expresar tu solicitud como algo que beneficiaría a la empresa.”
2. Mantén las cosas simples
Si la idea de pedirle un día a tu jefe te estresa más de lo que te va a relajar, entonces no seas tan específico y mantén la conversación super simple. Si tu compañía no tiene una mentalidad tan abierta, entonces considéralo como un “día de enfermedad”.
3. Pídelo con tiempo
Si piensas tomar un día, no olvides pedirlo con tiempo. Esto aumentará tus posibilidades de que te digan que sí. Además, le dará tiempo a tus colegas de prepararse para tu ausencia.
4. No sientas la necesidad de justificarte
Puede parecer fácil entrar en una descripción detallada de tu estado de salud mental o sentir la presión de explicar tu solicitud con detalles, pero realmente no tienes que hacerlo si no quieres.
Recuerda que no debes dar una explicación más allá de los detalles básicos a nadie, ni siquiera a tu jefe. Lo mínimo que deberías poder esperar de tu jefe es que puedan empatizar contigo, incluso si no están compartiendo una experiencia específica tuya.
Estas son algunas alternativas a un día de salud mental
Es importante señalar que no todos tienen la posibilidad de tomar un día de salud mental. “Las personas que trabajan en empleos por hora pueden ser despedidas si se toman un día libre, o simplemente no pueden permitirse la pérdida de salario … Incluso los trabajadores asalariados pueden haber agotado sus días de enfermedad”, dice el Dr. Gómez.
Entonces, ¿qué puedes hacer si simplemente no es posible tomar un día de salud mental? Intenta encontrar una hora o dos para la salud mental. “Podemos adaptar un día de salud mental en un pedacito más pequeño que funcione para nosotros. Cuando terminemos el trabajo, podemos tomar una hora para nosotros mismos para escribir en un diario“, nos dice el Dr. Gómez.
“O tal vez en un día libre o cuando no podamos dormir, podemos hablar por teléfono con un amigo cercano y conversar sobre los desafíos del mundo, así como nuestros recuerdos alegres compartidos de la infancia. No importa cómo sea nuestra vida, todavía encontramos tiempo para nosotros mismos.”
Esta nota fue originalmente redactada por Kylie Gilbert para instyle.com
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