El príncipe Harry, un miembro de la realeza con tres segundos nombres cuyo nacimiento fue tema de titulares internacionales, fue confundido recientemente con un empleado en un granero de árboles de Navidad en California.
Según People, el duque de Sussex y su esposa Meghan Markle hicieron una excursión discreta para comprar un árbol de Navidad para su casa en Montecito. En lugar de solicitar que el negocio cerrara para brindar a la pareja una visita sin tanta gente, los Sussex simplemente hicieron que su equipo llamara con anticipación para encontrar un “buen momento” para colarse.
“Teníamos nuestro lote vacío cuando llegaron allí; su agente los promovió en un buen momento para que vinieran en lugar de que nosotros lo cerráramos”, explicó un empleado.
Y casi salió sin problemas …
“Había una familia allí y su hijo pequeño, emocionado, corrió a través de los árboles hacia Harry y le preguntó si trabajaba aquí sin saber quién era”.
Bueno, ahora que Harry es libre de tener un trabajo no otorgado por la realeza, ¿tal vez el vendedor de árboles de Navidad cumple los requisitos?
Veamos los hechos:
1) Tiene barba. Y no cualquier barba, sino del tipo casi desaliñado que te animaría específicamente a comprar un árbol de Navidad. Tener vello facial no es un rasgo inherentemente rentable, pero yo diría que esta lógica se rompe cuando se trata de cualquier cosa.
2) Parece físicamente capaz de llevar un árbol. Esta no es una hazaña pequeña y probablemente una habilidad esencial en la industria de los árboles de Navidad.
3) Él es el Príncipe Harry. Entre el acento encantador y el hecho de que es una celebridad de alto nivel, sería difícil decir que no a un discurso de venta personal del duque de Sussex.
En conclusión, empresa de árboles de Navidad de California sin nombre, por favor, háganos un favor a todos y contrate a su nuevo empleado del mes, el príncipe Enrique Carlos Alberto David Mountbatten-Windsor.
Artículo Original: InStyle.com
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