Sí creías que todo había sido miel sobre hojuelas en la relación de William y Kate, la verdad es que no es cierto y esta historia (seguramente) nunca la viste venir.
A lo largo de los años, los duques de Cambridge se han convertido en una de nuestras parejas royals favoritas de todos los tiempos y podríamos decir que su historia de amor se convirtió en la fairytale más amada de muchos. Luego de casi 10 años de casados, tres hijos y uno que otro rumor de que las cosas no están bien entre ellos, la pareja ha superado todas las adversidades y el hashtags, #RelationshipGoals es una de sus principales características a la hora de describirlos.
Sin embargo, ¿quién dijo que los royals se salvaban de sufrir pequeños momentos de desamor? De acuerdo a Vanity Fair, Will no siempre fue el príncipe azul que conocemos pues en 2003 (dos años después de conocerse en St. Andrews) el hijo mayor de Diana de Gales decidió rechazar a Middleton durante su fiesta de 21 años.
“Cuando William asistió a la fiesta de 21 años de Kate en junio de 2003 en la casa de su familia en Bucklebury, Berkshire, la mirada que le lanzó al otro lado de la habitación cuando entró a la fiesta de los años 20 fue más que platónica. Sin embargo, en la fiesta de William en el castillo de Windsor, más tarde ese mes, parecía que Kate apenas se estaba registrando en el radar de William pues el príncipe parecía estar muy entretenido con una chica llamada Jecca Craig”, aseguró la publicación.
Dicho esto, todo parece indicar que Kate no siempre estuvo out of the woods durante su relación temprana con el príncipe pues él tenía un crush secreto con Craig.
Sin embargo, esto se quedó en un amor fugaz y actualmente tienen una fuerte relación amistosa y bueno, ya todos conocemos la historia de Will Kate.
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