Eva de Dominici es una modelo y actriz nacida en Argentina, a la cual seguramente conoces por su aparición en Chiquititas sin fin en el 2006 cuando empezó a actuar. Ella es una de las estrellas de la serie The Cleaning Lady de Fox y tiene más de 2.6 millones de seguidores en las redes sociales, donde muestra gran parte de su vida.
En este momento se encuentra en Chile, después de haber sido una de las protagonistas de la serie biográfica de Maradona, y está grabando su más reciente proyecto Sayen, desde donde se conecta por Zoom con InStyle en exclusiva y nos platica qué es lo que viene en el marco de nuestra edición de marzo, que celebra a Latinoamérica.
Entrevista con Eva de Dominici
¿Cómo ha cambiado tu carrera desde que empezaste a actuar hasta ahora?
Se asemeja a mi propio crecimiento y descubrimientos. Yo empecé muy chica y no recuerdo haber querido hacer otra cosa, desde los 5 años que les insistí a mis padres hacer esto, que me presentaran a audiciones, quería salir en la televisión, tenía una atracción a la pantalla o al escenario cuando iba a alguna obra.
Tenía ganas de que las demás personas miraran lo que estaba haciendo y jugar a ser otra persona y después eso se fue transformando y desarrollando cuando quedé en Chiquititas y que fue mi primer sueño cumplido ya que era una serie muy grande en Argentina y en el mundo, como todas las series de Chris Morena, a partir de ahí me dieron ganas de hacer otras cosas y me fui redescubriendo a mí misma.
Me di cuenta que era lo que yo quería hacer y empecé a presentarme en audiciones de cine y fue mutando hasta que salió la oportunidad de hacer proyectos en otro país y dije ‘¿por qué no?’, tal vez no estaba lista o no hablaba bien el idioma, pero este tiempo acá, incluso de maternidad y pandemia lo aproveché mucho para mejorar y salieron proyectos pequeños y luego llega The Cleaning Lady, que es una gran oportunidad. Siento que fui finando mi búsqueda, quería hacer muchas cosas y ahora tengo claro a dónde quiero ir.
Además del idioma, ¿cuál ha sido el mayor reto de actuar en series que se transmiten en Estados Unidos?
En principio ser inmigrante, agradeces mucho estar en otro país haciendo lo que te gusta y que te den trabajo no siendo de ahí. Sobre todo sentirte parte del proyecto, el crew es americano y de repente dices ‘¿estaré entendiendo todo? ¿estaré haciendo lo que pide el sistema?’ porque es otro idioma y hay cosas que se pierden, estar en otro lugar es como un nuevo reto.
En Argentina siempre te encuentras con alguien que ya conoces, acá es llegar presentarte y rehacerte, es una sensación que te obliga a salir de tu zona de confort, audicionar, presentarte y es un reto propio volver de cero a crecer. Empiezas en una pureza como actriz, que no tienes privilegios y acá también hay muchas chicas talentosas que dan todo de sí y que no hay privilegio para ti, encontrarte con nuevos directores, reuniones con gente nueva y cuando algo se hace realidad es como un mimo.
¿Tiene algo en común Eva con Nadia Morales, tu personaje? ¿Qué has aprendido mientras la interpretas?
Es un personaje que evoluciona mientras pasan los episodios, al principio empiezan detalles fugaces de lo que es Nadia y luego crece. Si tengo algo en concreto con ella, diría que las dos somos inmigrantes en Estados Unidos, venimos de abajo pero siento que tenemos vidas muy diferentes, sí creo que Nadia tiene una inteligencia para conseguir lo que quiere y es muy apegada a su marido, quiere formar este team con Arman, pero si algo no sucede ella tiene su propia inteligencia y no lo necesita a él, empezaría de nuevo.
Se mueve en un mundo de hombres, que este Cigar Lounge y siempre está rodeada de hombres corruptos muy creepy que la observan, la manera en la que engancha a otros hombres para conseguir deals en Las Vegas. Yo de muy chica me he manejado en un mundo de gente adulta y aprendí a no intimidarme por eso, no sólo estaba rodeada con hombres sino con adultos en general y fui aprendiendo a que no me pisen la cabeza y eso se aprende con la experiencia.
¿Qué cambios te gustaría ver en la industria de la tele y el cine en Latinoamérica?
Está cambiando, pero mi percepción es que todo está muy puesto en la juventud y la belleza de la mujer, no quiero generalizar pero la mayoría de las veces me llaman para ser esposa de hombres muy grandes que me llevan hasta 30 años, y no es un tema hablado en el guión está normalizado, pero hay una cuestión de que digo ‘¿por qué un hombre de 45 con una chica de 20?’, no lo juzgo pero hay algo demasiado normalizado en ese aspecto que se podría cambiar o hablar mucho más y no repetirse en todos los proyectos.
El otro cambio es que le den más oportunidades a gente nueva y talentosa, hay mucha gente que no le están dando tantos proyectos, creo que con las nuevas plataformas te das cuenta que hay una camada de gente nueva, con el cambio de formatos ya no se vende por la persona conocida que sale, sino por la historia. Es importante dar voz a los nuevos.
Hay gente que crea el contenido en las redes que tiene tanto peso que genera un impacto, nuevos cantantes y actores reales, orgánicos y la misma gente les empieza a dar foco, les llama la atención. A mí me gusta acercarme a la gente en Instagram, pero no soy tanto de generar contenido porque no tengo tanto tiempo, pero veo muchos creadores que tienen mucho talento.
¿Qué historias crees que Latinoamérica tiene para ofrecer y todavía no se les ha dado el debido foco?
Se están haciendo muchas biopics, siento que de varios hombres y estaría bueno ver también de mujeres. Hay una poetiza que me encanta, Alfonsina Storni, que es una gran mujer y no sé por qué todavía no se hizo. Los actores queremos estar siempre trabajando pero hay que estar atentos en qué estamos contando, de qué somos parte, cuál mensaje estamos dando.
Hace poco yo formé parte de la serie de Maradona y me encantaba cómo estaba escrito mi personaje, era muy independiente, que quería seguir su carrera, pero al final forma parte de un proyecto muy cuestionado a nivel de feminismo, más allá de eso creo que no veo gente de comunidades nativas, por eso me gusta la película que hago ahora de una chica Mapuche como protagonista y es de acción, urge más diversidad, edades, historias.
“Las historias se están escribiendo de una forma diferente. El personaje que está establecido como el villano se comporta de tal manera porque tiene sus razones, pero también el protagonista puede tener acciones que son cuestionadas como en The Cleaning Lady, donde la protagonista ayuda a un criminal pero es porque tiene un hijo que está muriendo”.
¿Qué historias te gustaría contar?
Me gusta mucho ver el cine de antes y series de antes, sin dejar de estar atenta. Yo interpreto en este momento, no cuento como tal historias, pero me interesa hacer cosas diferentes para no aburrirme, explorar diferentes mundos, me importa ver qué hicieron los directores o productores envueltos en el proyecto para ver su visión, y por último a mí me aburre contar las cosas de una manera moralista, quiero decirlas como son.
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