La moda no se olvida. De hecho, tiene muy buena memoria. En 2025, hay algo en el aire que huele a fiesta de graduación de hace diez años, a noches de antro con skinny jeans y clutch en mano, a selfies con filtro Valencia. Y no es casualidad. El péndulo de las tendencias está oscilando con fuerza hacia 2015 y lo que antes se consideraba “cringe”, hoy vuelve con aires de nostalgia.
Las reglas del juego han cambiado: lo que alguna vez juramos no volver a usar está de vuelta y más fuerte que nunca. Gladiadoras, bolsas XL, bandage dresses, y hasta los charms peludos que colgábamos del bolso como si fueran trofeos emocionales… todos están regresando. ¿Por qué? Porque en la moda todo regresa, pero cada vez lo hace con una nueva actitud. Aquí las seis tendencias de 2015 que están reclamando su lugar en el 2025.
¿Recuerdas 2015? Estas tendencias vuelven para dominar 2025
El renacer del bandage dress
Lo que alguna vez fue sinónimo de sensualidad ultra-glam, está viviendo su segundo aire. El icónico bandage dress, famoso por moldear el cuerpo como una escultura humana y popularizado por Hervé Léger, ha vuelto a la conversación. Según Google Trends, las búsquedas están en su punto más alto en una década, con el naranja como color estrella.
¿La diferencia? En lugar de las minifaldas de fiesta con tacón plataforma, ahora se lleva en versiones midi, en tonos sólidos y cortes más sofisticados. Hailey Bieber ya lo usó en una alfombra roja, y Kaia Gerber lo reinventó con elegancia minimal. El nuevo bandage no grita “noche de antro”, más bien dice “me invitaron a una boda cool y no pienso pasar desapercibida”.
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Gladiadoras para el verano más boho
Nada dice “verano 2015” como unas sandalias gladiadoras. Y aunque durante años fueron relegadas al fondo del clóset junto a los flecos y los crop tops, ahora están regresando con fuerza y con una vibra más elevada y boho chic. Las vimos en Dior, Alberta Ferretti y hasta en show goers de Chloé, donde se usaron como si nunca se hubieran ido.
La clave está en cómo llevarlas hoy: con faldas largas, vestidos de lino o mezclas inesperadas como shorts de sastre. Las nuevas gladiadoras no solo suben hasta la pantorrilla, también suben el nivel del outfit.
Cowboy hats fuera del rodeo
Si las bandanas están de regreso, tenía sentido que los sombreros de vaquero no se quedaran atrás. Lo que antes era exclusivo de festivales tipo Coachella o conciertos country, hoy se ha infiltrado en la moda de calle con fuerza inesperada. Y no, no es un disfraz: es una actitud.
Desde la pasarela de Louis Vuitton hasta looks de street style en París, las cowboy hats están teniendo un glow up. Las hay de cuero pulido, con textura de gamuza, con aplicaciones metálicas o en colores que rompen lo clásico: blanco hueso, rojo cereza, azul klein. Dua Lipa, Kendall Jenner y Rosalía ya las llevaron como piezas clave en outfits urbanos, y TikTok está repleto de tutoriales para saber llevarlas sin parecer que vas a una fiesta temática.
Bolsas grandes y con actitud
En tiempos donde el microbag reinaba (y apenas cabía un gloss), la lógica parecía perdida. Pero como todo en moda es cíclico, 2025 se declara oficialmente el año de las bolsas enormes. Y no hablamos solo de tamaño: hablamos de personalidad, de esas que cargan media vida y aún así se ven chic.
Louis Vuitton, Hermès, Miu Miu… todas las casas importantes han apostado por modelos gigantes, funcionales y glamorosos. ¿La referencia pop? La bolsa “ridículamente espaciosa” de Succession que se convirtió en meme, y sin querer, en ícono de esta nueva era. Hoy, tener una bolsa grande no es sólo práctico, es un statement.
Skinny jeans, pero con conciencia
Sí, lo sabemos. El trauma colectivo con los skinny jeans fue real. Pero la moda, como el amor, da segundas oportunidades. Y esta vez, los skinny están volviendo… con ajustes. Nada de jeggings que parecían segunda piel. Lo de hoy son cortes slim-straight, denim rígido, sin adornos y con inspiración dosmilera (piensa en Bella Hadid en Roma con camiseta blanca y leather jacket).
El comeback es generacional. Tanto Gen Z como millennials están redescubriendo su potencial, y en lugar de pelear por cuál silueta es más cool, están encontrando un punto medio donde la nostalgia se encuentra con el presente.
Bandanas como el accesorio más versátil
No se fueron porque nunca se fueron. Pero sí se reinventaron. Las bandanas, ese cuadrado de tela con vibes western y espíritu rebelde, están teniendo su momento otra vez. Y no solo en festivales o conciertos country.
Hoy, la bandana se lleva como cinturón, como accesorio para el bolso, como pañuelo al cuello tipo French girl, o hasta como toque inesperado en looks más pulidos. J.Lo, Farrah Fawcett y ahora toda la Gen Z en TikTok: pocas piezas han viajado tanto por el tiempo sin perder su esencia.
Lo kitsch es chic
Tal vez el accesorio más inesperado que volvió del pasado: los charms peludos, muñequitos con ojos de anime, y todo tipo de criaturas surrealistas están colgando otra vez de los bolsos más caros. ¿La culpable? Labubu, el peluche estrella que ahora adorna Louis Vuitton, Bottega Veneta y hasta la cuenta de Instagram de Lisa de Blackpink.
Lo maximalista es tendencia, y en 2025, tener una bolsa sin adorno se siente casi… aburrido. Desde Sanrio hasta versiones personalizadas y charms hechos en casa, este regreso es una celebración del humor, la nostalgia y la moda sin reglas.
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