Una pizarra casi en blanco, llena de potencial: el comienzo de un año completamente nuevo puede parecer abrumador y esperanzador a la vez. Pero con dos retrógrados en pleno apogeo (Marte, el planeta de la acción, hasta el 12 de enero, y Mercurio, el planeta de la comunicación, hasta el 18 de enero), sumergirte de lleno en tus planes de juego más ambiciosos podría no solo ser más difícil de lo habitual, sino simplemente no sentirse bien. Las emociones se dispararán solo unos días después de que lleguemos a 2023, gracias a la primera luna llena del año, en Cáncer.
El viernes 6 de enero a las 6:08 p.m., hora de CDMX, se asoma una luna llena que podría tener el poder de cambiar la forma en que manejas tu equilibrio entre el trabajo y la vida y ayudarte a abrirte ante emociones profundamente arraigadas dentro de tus relaciones personales y profesionales más cercanas.
La luna llena en Cáncer es una invitación a nadar en lo profundo de tus emociones
Las lunas llenas son una oportunidad mensual para concluir proyectos que comenzaste seis meses o incluso dos semanas antes. Son puntos de culminación, puntos de quiebre y una oportunidad de liberar cualquier cosa que ya no te sirva.
Y con la luna llena de este mes cayendo en Cáncer intuitivo, sentimental y orientado a la familia, harás bien en sintonizar con tu intuición, concentrarte en tus necesidades emocionales y explorar cómo algunos de tus vínculos ayudan o dificultan tu crecimiento y equilibrio. Las lunas llenas son, por naturaleza, un momento en el que estás obligado a dejarte llevar por emociones intensas, y cuando la luna está llena en el signo que rige, el cariñoso, compasivo y sensible Cáncer, tienes la oportunidad de estar aún más íntimamente en sintonía con tu mundo interior.
Cayendo en medio de la temporada de Capricornio, una época del año en la que nos concentramos en los hechos sobre los sentimientos, las lunas llenas de Cáncer presentan un período en el que podemos dar un paso atrás y asegurarnos de que nuestras cabezas estén sincronizadas con nuestros corazones. Después de todo, trabajar juntos es la clave definitiva para llegar a la cima de cualquier montaña que hayas elegido escalar.
La luna armoniza con el revolucionario Urano, lo que permite innovación y avances
La luna nueva cae a los 16 grados de Cáncer, formando un sextil muy cercano a Urano, el planeta de la rebelión y el cambio electrizante, que estará a los 15 grados de su compañero Tauro. Urano puede traer cambios repentinos de la nada, lo que puede ser un poco desconcertante. Pero alrededor del 6 de enero, su conexión positiva con la luna puede ofrecer cambios bienvenidos y formas innovadoras de manejar cualquier situación complicada.
Podrías sentirte más curioso, adaptable y abierto a adoptar un enfoque diferente, especialmente en términos de cómo te relacionas con los demás, específicamente con los miembros de la familia, dados los temas de Cáncer de esta luna llena. Por ejemplo, tal vez hayas estado trabajando para establecer límites saludables con un miembro de tu familia autoritario, incluso tóxico, o estés luchando por curar una herida profunda del pasado.
La conexión de la luna con Urano podría convertirse en un momento de iluminación en el que puedas ver la situación de una manera nueva e iluminadora e incluso puede inspirarte para abordarla desde una dirección diferente.
El sol se encontrará con Mercurio, actualmente retrógrado, lo que podría alimentar una epifanía
La luna llena ocurre horas antes de que el mensajero Mercurio, retrocediendo desde el 29 de diciembre, se una al sol confiado, en Capricornio. A pesar de que Mercurio está retrógrado, este emparejamiento puede ser realmente revelador y generar una autorreflexión productiva.
Habiendo reconocido, procesado y trabajado las emociones que la luna llena te trajo, esta reunión podría estimular un plan pragmático o, al menos, una oleada de energía emprendedora que puedes canalizar para crear. Sin embargo, si no te sientes súper centrado, el movimiento retrógrado de Mercurio en el signo cardinal de tierra presenta la oportunidad de mantener tus ojos en el espejo retrovisor por un poco más de tiempo. Sumergirte valientemente en el trabajo por cuenta propia que involucre el pasado puede prepararte para un futuro aún más brillante y productivo.
Nota original: InStyle.com
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