Con esta recomendación vas a disfrutar la playa tanto que querrás vivir por siempre cerca del mar.
Vivimos el día a día de manera automática que muchas veces se nos olvida frenar, relajar la mente, el cuerpo y apreciar lo que este hace por nosotros a diario. Si bien nos va, a veces reservamos unos minutos del día para meditar, pero siempre tenemos estrés o pensamientos que no nos dejan irnos del todo.
Sin embargo, eso cambia cuando sales de vacaciones y más si se trata de la playa. Tener el mar y las palmeras como escenario recurrente hace que tu ser, que vive de forma apresurada, comience a vivir todo con mayor quietud. Entonces ¿ qué opinarías si además de estar en un paraíso puedes vivir una experiencia inmersiva todos los días? La fórmula de la felicidad.
Esa es la propuesta de la marca de resorts de lujo, Paradisus by Meliá, en conjunto con SUDA, un nuevo entrenamiento holístico que se especializa en experiencias wellness innovadoras. La idea es la siguiente: poder disfrutar de unos días en la playa y un hotel all inclusive, como Paradisus, mientras también trabajas tu cuerpo y tu mente. Para entender este concepto, el Hotel Paradisus de Los Cabos y SUDA nos invitaron a vivir la experiencia y entender los beneficios de esta gran alianza.
Así vivimos la experiencia de Paradisus y SUDA
El primer día conocimos al equipo SUDA, conformado por artistas y bailarines que integran yoga, meditación y baile en cada una de las actividades. Desde el inicio nos explicaron que las experiencias eran para cualquier persona, y lo pudimos comprobar desde el inicio, pues en nuestro grupo había mucha diversidad.
Iniciamos con una primera experiencia de yoga inmersiva, en la cual logramos conectar con nuestro cuerpo haciendo yoga activa y luego meditando con el atardecer y el mar de fondo. Desde la primera clase, el equipo SUDA nos recordó la importancia de la respiración y cómo esta puede ser sanadora. Muchas veces inhalamos y exhalamos sin ser conscientes o realmente sentirlo.
El segundo día tomamos una clase llamada Primal Movement, en la cual nos enfocamos en movernos con propósito, a ser conscientes de nuestros movimiento y a hacerlo a nuestro propio ritmo. ¿No les pasa que toman una clase y siguen a los demás para ver si lo están haciendo bien? Bueno, aquí hay otra intención.
Para empezar, el grupo se acomoda en círculo, así te guías más por la energía del que tienes alado y no buscas la imitación. También, cada uno de los movimientos buscan sacarte de tu zona de confort y a interactuar con la energía de los demás. En esta clase poco a poco vas olvidando la pena y te vas alineando con la vibra de todo tu grupo.
Ese mismo día, por la tarde, tuvimos una meditación guiada en la cual trabajamos mucho en nuestra respiración. Por medio del sonido de los cuencos y el aroma del copal, pudimos relajarnos y adentrarnos un poquito más en nuestros pensamientos. La clase inició al atardecer con los ojos abiertos. Poco a poco, se fueron cerrando conforme avanzamos en los ejercicios. Al abrirlos, nos sorprendimos por una noche estrellada espectacular.
Los últimos dos días aprendimos a entender la manera en la que se puede mover nuestro cuerpo y los miles de movimientos que pueden salir de este, comprendiendo que nunca nos aburriremos de él, siempre y cuando tengamos imaginación. En la actividad final pudimos reunir todo lo vivido en días pasados, pero inmersos en un desierto, con la naturaleza como espectadora.
Cuéntame más
Imagina si a toda esta experiencia inmersiva le agregas una oferta gastronómica espectacular y un spa al que puedes acudir diario por masajes y faciales de locura, en realidad se vuelve el destino perfecto. Nuestras recomendaciones dentro del hotel Paradisus es el restaurante Le Petit Chef en la cual puedes disfrutar una cena de cuatro tiempos servida por un pequeño chef en movimiento que juega con tu plato y te muestra todas las experiencias que ha tenido que vivir para presentarte una deliciosa burrata, sopa de mariscos, una espectacular langosta y un postre con frutos rojos.
Otro must es el masaje relajante del spa Yhi ya que no solo disfrutas de un servicio de 60 minutos, también puedes aprovechar el ritual hidrotermal del lugar que inicia con vapor, sigue con sauna y termina con una alberca infinity que te permite llegar al punto de relajación más alto.
La experiencia SUDA regresará a los resorts Meliá cuando menos lo esperes. Sin embargo, la cadena ya cuenta con experiencias wellness diarias que van en perfecta mancuerna con sus increíbles destinos, solo necesitas ser huésped y anotarte un día antes para vivirlas. Si buscas relajarte totalmente cuando vas de vacaciones, esta debe ser tu elección, te la recomendamos al 100!
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