Michelle Pellicer es la nueva Cindy La Regia en la adaptación a serie de Netflix. Platicamos con la actriz quien nos contó sobre cómo llegó al mundo de la actuación, su proceso de casting y lo que le dejó en su vida este nuevo papel. También, las guionistas de la serie Paola Mazlum y Anna Grajales nos contaron un poco más sobre cómo fue reescribir la historia de nuestra regia favorita.
Michelle Pellicer es una nueva versión de Cindy La Regia
¿Cómo inició tu carrera como actriz? ¿Cuál fue tu primer papel?
Bueno mi carrera como actriz comenzó cuando yo iba con mis hermanos a los boy-scouts. Una de mis compañeras de los boy-scouts hacía comerciales y su mamá habló con mi mamá a ver si yo estaba interesada en esto. Mi primer papel fue un comercial y desde la primera vez supe que quería hacer eso toda la vida.
¿Cómo fue el proceso de casting?
El casting fue hace más de un año, en octubre del año pasado. Yo a los 15 años había sido parte de un cortometraje llamado Pink de Indra Villaseñor y ella fue la que me habló para decirme sobre el casting. Un día antes del casting yo me puse a ver como 80 veces la película de Cindy La Regia para aprender más sobre el personaje, el acento y ver cómo son las actitudes de Cassandra en la peli.
Hice el casting y me dieron callback y después otro. Cuando terminé el último callback estaba super nerviosa y ansiosa. Pensé que no me iba a quedar con el papel porque sentí que lo había hecho muy mal. Mientras tanto yo estaba estudiando en la preparatoria y me acuerdo que le conté a mi directora que había hecho la audición. Ese mismo día me llamaron y me dijeron que tendría otro callback. Fui al callback y me hicieron una prueba de cómo me vería güera y me hicieron pruebas de vestuario. Yo ya me iba a ir a mi casa pero me llamaron de nuevo a las oficinas de Dragon y me dieron la noticia.
¿Te identificas en algo con la personalidad de Cindy?
Siento que las dos somos ese tipo de persona que quiere ayudar tanto que al final no se da cuenta si está ayudando de más y puede llegar a salir lastimada. Aprendí que es muy importante no lastimar a nadie. Está bien soñar pero también hay que tener los pies sobre la tierra. Es importante estar para ti, complacerte a ti, serte fiel a ti pero nunca dañando a los demás.
¿Qué fue lo más divertido de grabar la serie y qué aprendiste?
Creo que poder ver con mis propios ojos una sociedad de la que jamás en mi vida pensé que iba a ser parte. Ser parte de la alta sociedad me hizo sentir como una princesa. Me sentí como la Sirenita, me sentí como en Disneyland. Fue muy divertido conocer estos nuevos lugares y conocer estas mentalidades distintas. También encontrar una nueva familia en todas las personas de la producción. Tuve la oportunidad de conocer a una niña de ocho años que se puso a llorar cuando me conoció, algo que nunca me había pasado en la vida. No podía creer que algo como eso me estuviera pasando. Me dio un abrazo que se sintió súper real y genuino.
Si tuvieras la oportunidad de participar en otro remake de una peli o serie mexicana ¿a quién te gustaría interpretar?
Me gustaría hacer Macario porque mi tía participó en ella y me gustaría poder conectarme más con ella. Nunca tuve la oportunidad de conocerla pero se que Macario es una película que ella estaba muy orgullosa de ser parte de, entonces estaría muy lindo hacer un remake de Macario y volver a esa época del cine de oro.
Además, Paola Mazlum y Anna Grajales, guionistas de la serie, nos contaron más sobre esta nueva adaptación
¿Cómo fue que tomaron la decisión de hacer una serie de Cindy La Regia? ¿Por qué una nueva serie en vez de otra peli o un spin off?
PM: Cuando yo me uní a la serie, esta decisión ya estaba tomada. Sin embargo, este formato sí fue una parte de lo que me convenció a unirme al proyecto. En mi opinión, esta era una gran idea porque, aunque me encantan las otras versiones de Cindy La Regia – desde los cómics de Cucamonga, hasta la película – varias generaciones ya han tenido la oportunidad de identificarse con un personaje tan bonito y complejo como Cindy, así que me encanta la idea de darle esta oportunidad a una generación más jóven. Además, en esta serie se nos permitió explorar ciertos temas de los cuales a veces es difícil hablar, a pesar de que forman parte de la realidad de los adolescentes actuales. En mi opinión, esto hace que este proyecto se transforme en una herramienta para aperturar el diálogo sobre estas situaciones y una serie nos otorga el formato adecuado para poder tratar estos temas de una forma más profunda y no sólo superficial.
AG: La decisión nace desde Draco Films y Ruth Cherem, la productora de la película y la serie. Creo que la intención era buscar nuevas versiones del personaje, así como la adaptación de la película no era una adaptación 100% fiel al cómic de Cucamonga. En nuestra mente, Cindy La Regia es nuestro Batman – tiene diferentes caras y versiones, cada una ejecutando una nueva mirada hacia el personaje que conocemos y queremos. Lo que nos interesaba explorar era cómo sería una Cindy hoy en una prepa, enfrentandose a no sólo la hiperconetividad que tienen los GenZs, pero a muchas otras cosas como el acoso, la busqueda de identidad, la violaciónd de la privacidad, el aborto y otros temas que no se habían abordado antes en la película o el cómic.
¿El personaje de Cindy se ve, habla o piensa diferente en esta nueva serie que en las pelis o mantiene su esencia?
PM: Creo que esta Cindy es diferente a la que se conoce, primero porque esta es una Cindy de 16 años, así que su nivel de madurez, sus problemas y sus intereses, son diferentes por naturaleza. Además, queríamos darnos la libertad creativa de separarnos de las versiones anteriores para poder dar mensajes diferentes y hacer que la serie se sienta actual. Sin embargo, la esencia se mantiene ya que nuestra Cindy sigue siendo un personaje aspiracional que cuenta con cierta inocencia y una necesidad de autodescubrimiento mientras trata de salir de su burbuja. Por último, en nuestra serie Cindy todavía no ha tenido la experiencia de vivir en la Ciudad de México, así que sus modismos y modos de hablar se basan por completo en su vida en San Pedro.
AG: En su esencia, sigue siendo Cindy, pero si esta versión es diferente a las otras y nos permite explorar otros temas
Mucha gente dice que Cindy la Regia capta perfectamente los modismos y formas de hablar de los regios ¿Cómo fue el research para el personaje?
PM: El proceso de investigación para poder llegar a ese resultado fue detallado y extenso. Para empezar, contábamos con asesores de San Pedro con los que teníamos juntas aproximadamente cada 15 días. Estos asesores eran más que nada jóvenes de la edad de Cindy y sus amigas, que viven en San Pedro. En estas juntas no sólo poníamos a prueba escenas o tramas, sino que les dábamos la oportunidad de expresarse libremente para poder entender su modo de hablar, lo que hacen para divertirse, los temas de los que más platican, la forma en la que viven sus relaciones amorosas, de amistad y familiares, etc. Además de estas juntas, se hizo un viaje de research a Monterrey para poder experimentar estas conversaciones en persona, en sus entornos, poder ir a los lugares a los que los chavos de Monterrey salen e incluso acompañarlos a sus escuelas. Toda esta investigación resultó muy reveladora ya que nos ayudó a descubrir que había varios temas complejos y delicados que están muy presentes en estas personas, pero de los cuales la mayoría de la gente no se está atreviendo a hablar. A nosotros nos pareció importante darles una representación genuina y personajes identificables en la pantalla para que así sepan que no están solos.
Anna Grajales: Fue muy intenso pues queríamos que la serie, más que caer en los clichés regios o burlarse, fuera una carta de amor para San Pedro. Tuvimos la oportunidad de ir a San Pedro a un viaje inmersivo en el que fuimos a varias prepas, tomamos clase y pudimos observar cómo hablaban e interactuaban los estudiantes. También, bruncheamos con varias adolescentes para entender qué les preocupa sobre crecer y madurar. Fuimos a una carnita asada dónde varios chavos nos enseñaron lo que realmente era una fiesta casera. Fuimos a antros, a centros comerciales, a restaurantes y a todos los lugares top de San Pedro, que son a los que Cindy iría. En el cuarto de escritores, la asistente del cuarto (Maki Marcos) era de San Pedro y nos ayudaba mucho a entender los detalles. Igual contamos con un grupo de asesores (que en realidad eran chavos de las prepas) durante todo el proceso. Nos conectabamos casi cada semana y ellos nos aterrizaban mucho al momento de escribir (y también nos contaban muchos chismes de las prepas jajaja).
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