Si hay algo con lo que definitivamente no puedo salir de mi casa es con un lip balm. Es uno de mis must haves de belleza que nunca falta en mi bolsa pero el cuidado de los labios va mucho más allá que nuestra barra favorita de lip balm. Obviamente todo depende de la fórmula o marca que elijas haciendo toda la diferencia entre obtener unos labios suaves, descamación o aún más resequedad. La piel de nuestros labios es una de las más delgadas que hay en el cuerpo y por eso necesitamos un cuidado especial, si pudiéramos darte una recomendación sería: optar por un lip moisturizer.
Lip balm vs lip moisturizer: las principales diferencias
Lo que hace un lip balm, además de las diferentes funciones que tenga dependiendo la marca, como por ejemplo agregar un poco de plump, es dar alivio y suavidad a los labios, pero no cuentan con una fórmula hecha para pasar la barrera superficial de los labios y realmente llegar al fondo humectando desde adentro. Por el otro lado, los lip moisturizers sí.
Como mencionamos, los lip balms usualmente contienen agentes como brillo o plumping con fines estéticos, por lo que muchas veces los moisturizers dejan de lado esos ingredientes para enfocarse únicamente en la hidratación de los labios. Incluso los parches y mascarillas de labios muchas veces se utilizan para fines de dar suavidad pero en realidad no penetran como deberían. Un lip moisturizer incluye una mezcla de humectantes, emolientes y oclusivos que hacen que la hidratación pase de la primera capa de los labios manteniéndola dentro y ayudando a aliviar los labios agrietados.
También hemos escuchado mucho hablar de los péptidos en los labios en especial en los productos virales de Hailey Bieber y su marca Rhode. Este ingrediente también puede ser un buen aliado a la hora de cuidar nuestros labios ya que los péptidos se encargan de traspasar la capa de la epidermis para un proceso de autorreparación aumentando la producción de colágeno.
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