Lo que empezó como una campaña navideña terminó convirtiéndose en uno de los escándalos más grandes en la carrera de Chiara Ferragni, la influencer italiana. El famoso “Pandoro Gate” ya llegó a los tribunales y, en una audiencia clave en Milán, la fiscalía solicitó un año y ocho meses de cárcel para la influencer por fraude agravado.
Sí, leíste bien. La empresaria digital más famosa de Italia atraviesa uno de los momentos más delicados de su vida pública y todavía no hay veredicto final.
¿Quién es Chiara Ferragni?
Chiara empezó en 2009 con su blog The Blonde Salad y pasó de ser una fashion girl de internet a un imperio global. Ha colaborado con marcas como Dior, Chanel y Tod’s, tiene su propia línea de moda, cosméticos y accesorios, y durante años fue considerada una de las caras más influyentes del mundo digital.
También es mamá de Leone y Vittoria, que tuvo con el rapero Fedez, de quien se separó en 2024 en un divorcio sumamente mediático, rodeado de rumores de infidelidad. Entre escándalos personales y ahora este proceso legal, los últimos años no han sido nada fáciles.
Pandoro Gate explicado
Todo gira alrededor de una colaboración navideña de 2022 con la marca Balocco: el Pandoro Pink Christmas, un pan dulce similar al panettone que se vendía a un precio mucho más alto de lo normal, con la promesa de apoyar a niños hospitalizados en Turín.
Según las autoridades, la donación de unos 50 mil euros al hospital Regina Margherita ya estaba pactada desde antes, o sea que no dependía de cuántos pandoros se vendieran, aunque al público se le hizo creer que cada compra ayudaba a la causa. Algo muy parecido pasó con los huevos de Pascua “con causa” que Chiara también promocionó.
De acuerdo con la fiscalía, las empresas de Chiara ganaron más de 2.2 millones de euros euros vendiendo estos productos, aunque las donaciones reales no dependían de las ventas.
Multas, acuerdos y más personas implicadas
Desde que estalló el escándalo, Chiara ya ha pagado alrededor de 3.4 millones de euros en multas, indemnizaciones y donaciones. Sin embargo, no es la única persona involucrada en el proceso. Fabio Maria Damato, su excolaborador, también enfrenta una posible condena, mientras que Francesco Cannillo, presidente de Cerealitalia, está incluido en la investigación por su vínculo con las campañas señaladas.
Además, varias asociaciones de consumidores participan como parte acusadora en el juicio. Por su parte, la defensa de Chiara busca que el caso se resuelva mediante procedimiento abreviado, lo que podría reducir la pena en caso de una sentencia condenatoria.
¿Chiara podría ir a la cárcel?
Técnicamente, el delito de fraude agravado en Italia puede castigarse hasta con cinco años de prisión, pero en este caso la fiscalía solicitó un año y ocho meses de cárcel. Y cuando la condena es menor a dos años, existe la posibilidad de llegar a un acuerdo para no entrar a prisión, aunque la sentencia sí se cumpla por otras vías.
La defensa intervendrá nuevamente el 5 de diciembre, y el veredicto final está previsto para el 14 de enero de 2026. En una audiencia a puerta cerrada, Chiara, de 38 años, negó las acusaciones y aseguró haber actuado de buena fe. Ante los medios, se ha limitado a decir que confía plenamente en la justicia italiana. Hasta ahora, no ha dado declaraciones más extensas sobre el caso.
Mientras tanto, enfrenta uno de los retos más fuertes de su carrera: reconstruir la confianza de su audiencia, que suma más de 28 millones de seguidores en Instagram.
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