5 trucos para que tu matcha casero quede increíble
Estilo de vida

5 trucos para que tu matcha casero quede increíble

Si eres de las que no puede vivir sin su dosis diaria de matcha (no te sientas culpable), esta nota es para ti. Sabemos que el matcha no es solo una bebida verde que luce bonita en Instagram, sino todo un estilo de vida: antioxidantes, energía natural y ese sabor único que ya conquistó a medio mundo.

Pero si ya lo tomas en latte, lo has probado en postres y hasta lo has agregado a tus mascarillas faciales, tal vez creas que ya lo viste todo… Spoiler alert: no es así.

Sofía López
Instagram
@sofialopezbe

¿Fan del matcha? Estos 5 trucos fáciles y creativos te harán disfrutarlo de formas que no habías imaginado. Desde recetas inesperadas hasta usos alternativos que te van a sorprender (y que vas a querer probar en cuanto termines de leer). Así que ponte cómoda y prepárate para llevar tu obsesión matcha al siguiente nivel.

Trucos para hacer matcha que (aún) no has probado

Empieza con agua fría (¡no caliente!)

Antes de nada, mezcla 20–30 ml de agua fría o a temperatura ambiente con tu matcha para formar una pasta suave. ¿La razón? Si agregas directamente agua caliente, el polvo tiende a formar grumos y puede adquirir un sabor amargo.

Video Recomendado

Además, al proteger el matcha de un choque térmico, conservas mejor sus nutrientes y el delicado perfil de sabor. De hecho, el matcha preparado en agua fría conserva tanto la cafeína como la L-teanina, otorgando ese “boost” relajado sin la acidez del agua caliente. Una buena técnica es cold-brew: el resultado es más fresco y menos amargo, ideal si ya eres fan del sabor intenso del matcha.

Cambia al batidor de resina o bambú

¿Tienes una mini batidora eléctrica? Está cool para espuma rápida, pero el sabor se resiente. La auténtica unami del matcha necesita un batidor tradicional: el chasen de bambú o su versión de resina. Estos crean una crema suave y más deliciosa que las burbujas gruesas que genera un batidor eléctrico. El chasen emulsiona el polvo de forma uniforme, liberando todo su sabor y textura cremosa. 

Aunque si buscas algo más práctico, el batidor de resina ofrece durabilidad, fácil limpieza y resistencia al molde, sin sacrificar calidad.

Matcha
batidor de matcha

Tamiza con un colador fino

Aunque tu matcha parezca suave, el polvo tiende a apelmazarse, es decir, que absorbe humedad y forma grumos incluso dentro de la lata. Lo ideal es tamizar justo antes de batir. Usa un colador tipo chakoshi o uno de malla fina: presiona ligeramente con una cuchara y obtendrás una suspensión sin grumos, más aterciopelada.

Matcha + sal = más umami

¿Sabías que una pizca de sal puede potenciar el perfil umami? Solo necesitas una pizca para intensificar los aminoácidos que ya están presentes en el matcha ceremonial.

El resultado es un sabor más rico, ideal si te encanta la nota sabrosa y compleja del matcha. Puedes usar esta mezcla para aderezar desde tempura o pescado hasta palomitas o verduras, dándole un toque gourmet de umami con una mínima intervención.

Sarra Salhi
Instagram
@_sarrasalhi

Capas estéticas: hielo, leche y matcha

Para un iced latte con efecto visual de revista, sigue este orden: primero hielo, luego leche, y por último, tu matcha batido. Si agregas matcha caliente sobre leche templada, se hunde creando un caos visual. En este orden, el matcha crea una capa superior que luego desciende suavemente, logrando ese efecto degradado tipo café-latte. Además, añadir un poco de jarabe o azúcar ayuda a que las capas se mantengan separadas.

Resultado: bebida deliciosa y súper instagrameable.

Explora más en: Instyle.mx