¿Para ti, qué es la abundancia? Puede ser el dinero, pueden ser amigos, experiencias, entre muchas otras respuestas, la verdad es que todas son válidas. La abundancia es definida como una gran cantidad de algo, espiritualmente, son las muchas bendiciones que el universo te ha dado, desde despertar por las mañanas, hasta el café que te tomaste. Muchas veces no lo valoramos como tal, resulta que es más un estado mental y emocional en el que una persona sabe lo que merece y agradece, así atrae cosas buenas a su vida. Se le dice vibrar en abundancia, aquí te decimos qué hacer para tenerlo.

Pero, ¿qué es vibrar en abundancia?
Es poder, es plenitud, capacidad, fuerza y sobre todo gratitud. Este estado mental es totalmente positivo, se relaciona con la ley de atracción. Si te sientes bien y agradecido, atraes más de eso a tu vida. Saber que eres suficiente, valorando quién eres y cada cosa que recibes.
Para lograr este mindset hay que hacer esto
La plenitud es mejor que la carencia: tus creencias limitantes te están impidiendo tener lo que deseas. En lugar de decir “no puedo” o algo como “todo está muy terrible”, afirma con “Estoy en camino a recibir lo que quiero”, “Merezco lo mejor”.
Hazlo desde la confianza y no desde el miedo: Cada vez que tomas una decisión con ese guiño de escasez, nada llega. Hacerlo desde la confianza es lo más óptimo, básicamente, fake it till you make it.
Acepta las oportunidades: Claro que está genial que tú invites el matcha, pero si al recibirlo de vuelta te sientes incómoda o te cuesta trabajo, es una señal que mandas al universo y prefieres no recibir nada.
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Generosidad, pero con límites: Cuando das con buena intención, el universo te recompensa con 7 veces más. Dar también es recibir, por eso, brinda el paso, dile a esa girly lo lindos que están sus zapatos, apoya a tus amigos, etc. Sin dejar de lado lo que tú quieres, también háblate bonito.
Arréglate a ti y a tu espacio: Cuando te rodeas de abundancia visual o emocional, influye en tu energía. vístete cómo te guste y limpia tu espacio.
Practica la gratitud: La abundancia llega cuando agradeces. Al hacer una introspección, podrás ver que hay tantas cosas para decir gracias, desde estar leyendo esta nota, escuchar tu canción favorita hasta agradecer lo que eres y lo que tienes.

La valoración propia para vibrar en abundancia
Sí, el paso más importante para lograrlo es valorarte a ti, agradecer y amate. Cuando empiezas a verte con amor, con respeto y sin juicios, tu energía cambia, lo que se refleja en todo lo que haces, cómo decides y cómo actúas. Repite tres veces en la noche la siguiente afirmación: “Yo confío en mi esencia”
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