El 24 de julio viene con drama cósmico del bueno. Por un lado, tenemos Luna Nueva en Leo, fuego, corazón y ego al máximo. Por el otro, Mercurio se pone retrógrado (sí, otra vez), así que prepárate para una montaña rusa emocional.
Este combo cósmico es puro “todo o nada”: si vas a amar, que sea con drama y de verdad. La Luna Nueva en Leo enciende el corazón y nos empuja a brillar, a lanzarnos por lo que queremos y a sentir sin filtros.
Peeero… Mercurio también entra en retrógrado, así que cuidado con actuar por impulso. Puedes sentirte confundida, decir algo de más o malinterpretar señales. ¿La clave? Escucha a tu corazón, pero también a tu intuición (y revisa dos veces ese mensaje antes de enviarlo).
La energía de la Luna Nueva en Leo
La Luna Nueva representa siempre un reinicio emocional, un punto para dejar ir y sembrar nuevas intenciones. En Leo, la invitación es clara, poner al amor propio en el centro del escenario. No se trata de buscar la aprobación externa, sino de abrazar quién eres con toda tu luz, sin máscaras ni filtros.
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Este ciclo lunar puede traer momentos de cuestionamiento profundo: ¿sigues en una relación que te hace sentir vivo o solo por costumbre? ¿Es hora de cerrar ciclos y apostar por un nuevo comienzo? La energía de Leo exige valentía para soltar y para brillar con autenticidad, recordándonos que la conexión más importante es con la persona que ves en el espejo.
Un día antes, Venus en Géminis y Marte en Virgo crean una tensión que puede sentirse como un tira y afloja entre deseos y acciones. Esta combinación aumenta la incertidumbre en temas amorosos, pero también enciende la pasión y el conflicto, la típica mezcla entre querer y no saber cómo expresar lo que sientes.
Mercurio retrógrado y el reality check emocional
Y por si fuera poco, Mercurio está retrógrado, lo que significa que hay que pisar el freno antes de hablar o actuar. Este tránsito puede traer malentendidos, mensajes confusos y tensiones en las relaciones, así que lo mejor es tomarse todo con calma, pensar dos veces antes de responder y no asumir lo peor si algo se siente raro.
Este retroceso también saca a la luz verdades difíciles y nos confronta con dinámicas de poder, especialmente por la influencia de Plutón retrógrado en Acuario y Saturno y Neptuno en Aries. Es un llamado a crecer emocionalmente y a replantear qué conexiones valen la pena y cuáles solo drenan nuestra energía.
El consejo para estos días es: no tomes decisiones impulsivas, escucha con atención y da espacio para que las cosas se aclaren. La mezcla entre la confianza de Leo y la atención que exige Mercurio retrógrado puede ser un balance perfecto para navegar este ciclo con madurez.
Cómo aprovechar la Luna Nueva en Leo
Las Lunas Nuevas son puntos de reinicio. Un momento energético perfecto para manifestar, soltar el pasado y sembrar intenciones. Leo, como signo de fuego y de individualidad, te impulsa a abrazar tu esencia sin filtros ni máscaras.
Haz un ritual que te haga sentir en control, prende una vela, escribe lo que deseas soltar, redacta una carta para tu “yo” del futuro, o simplemente visualízate brillando sin pedir permiso. Pero hazlo desde la honestidad emocional, no desde el ego.
Eso sí, ten cuidado con cómo recibes la crítica en estos días. Leo es un signo fuerte, pero también puede ser muy terco. Si alguien que te quiere te da feedback, escucha antes de reaccionar. No todo es un ataque. A veces es una oportunidad para crecer.
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