Por más que lo queramos, sanar no es un camino recto ni tiene una meta fija. Es un proceso que va en ciclos, a veces se enreda, cambia de forma y crece con nosotras. Cuando Quirón el sanador herido se pone retrógrado del 30 de julio de 2025 al 2 de enero de 2026 el universo nos hace una invitación a mirarnos más allá de las heridas y a reconocernos desde un lugar más profundo que el dolor. Aquí te explicamos…
¿Qué significa este tránsito astrológico?
En la mitología, Quirón era un maestro, un chamán y un sanador… pero él no podía sanar su propia herida. Por eso, en astrología se le conoce como “el sanador herido” y también como “el puente arcoíris”. Quirón es un planeta menor que se mueve entre Saturno (lo material) y Urano (lo espiritual), así que su energía conecta lo físico con lo emocional y lo espiritual.
Desde 2018, con Quirón en Aries (el signo del yo, del fuego interno y las ganas de vivir) hemos estado aprendiendo lo que significa recuperar nuestra fuerza después del dolor. Han sido ocho años de proceso, donde poco a poco hemos vuelto a decir “yo soy” sin miedo, sin vergüenza y sin dejar que la herida hable por nosotras.
Quirón retrógrado en Aries
Este tránsito es como una pausa cósmica para que te preguntes desde dónde estás contando tu historia. ¿Te defines por lo que te rompió, o ya es momento de reconocerte por todo lo que has construido después?
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Quirón retrógrado se siente como mirar una cicatriz vieja y decir: esto no me borra, me transformó. No se trata de olvidar lo que pasó, sino de no quedarte atrapada en eso. Cuando logras mirar con compasión, algo se desbloquea. Empiezas a ver con más claridad el dolor de los demás. Entiendes que muchas veces la gente no es fría ni distante por maldad, sino porque también está rota y haciendo lo posible por seguir adelante.
La retrogradación de Quirón también puede abrirte la puerta a la creatividad. Cuando dejas de pelearte con el dolor y empiezas a hacerlo parte de ti, algo nuevo empieza a tomar forma. Puede ser una canción, un dibujo, una pieza de cerámica, un texto… lo que sea que necesites sacar en este momento.
¿Cómo vivir este Quirón retrógrado con intención?
- Revisa tu narrativa interna: ¿en qué momentos te estás contando desde la herida y no desde tu poder?
- Haz espacio para una práctica de reconexión: puede ser meditación, journaling o una clase de yoga restaurativo que te ayude a escuchar lo que vive dentro de ti.
- Crea algo desde tu experiencia: no necesitas ser artista. Solo necesitas honestidad. Escribir, bordar, cocinar, decorar… todo es válido si lo haces con intención.
- Permite la compasión: contigo y con los demás. Todos estamos lidiando con algo.
Quirón retrógrado es una oportunidad para reconectar contigo misma. No se trata de olvidar lo que dolió, sino de soltar la necesidad de seguir cargándolo. Es un momento para mirar hacia adentro, recoger las partes que dejaste atrás y empezar a integrarlas.
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