¿Te imaginas un crucero donde vuelves a cantar como cuando eras niña, cenas con princesas y bailas con piratas? ¡Todo esto es posible en un mismo lugar! Bienvenida al Disney Dream. ¿Quién dijo que Disney es solo para niños? Basta con viajar en él para darte cuenta de que la magia es para todos. Es un lugar donde los que crecimos viendo princesas, coleccionando VHS y soñando con castillos podemos desconectarnos de la rutina y volver a cantar “Part of Your World” como si no hubiera un mañana.
¿Qué hace tan especial a Disney Dream?
Este crucero es la mezcla perfecta de nostalgia y diversión. Es la magia de descubrir nuevas formas de disfrutar el presente: descansar y dejarte sorprender por detalles que te hacen sentir en una película, pero sobre todo reconectar con esa parte de ti que aún cree en lo imposible. Hay shows que te hacen llorar de la emoción (¡Beauty and the Beast!), cenas inolvidables en restaurantes temáticos y hasta fuegos artificiales en altamar. Además de un tobogán que cruza por fuera del barco, ¡literal, vuelas sobre el mar!
El Disney Dream es uno de los barcos más completos de la flota de Disney Cruise Line. Tiene capacidad para más de 4,000 pasajeros, y este 2025 tiene viajes a Bahamas, México, Australia y Nueva Zelanda. Todo está diseñado para que te sientas cómodo y relajado desde el primer instante; el detalle en todo es impresionante, desde los olores en los pasillos hasta los cuadros interactivos que te saludan mientras caminas por el barco. En todo momento podrás encontrarte a tus personajes favoritos, tomarte fotos con ellos y emocionarte igual que cuando tenías 7 años.
¡Actividades para todos y para cada mood!
Si vas en plan familiar, hay clubes infantiles para distintas edades, como el Oceaneer Club, para niños de entre 3 y 12 años (¡sí, tienen un cuarto inspirado en el de Andy de Toy Story que parece sacado del set!). Los teens tienen sus propios espacios, Edge y Vibe, donde pueden jugar videojuegos, cantar karaoke, nadar en una alberca sólo para ellos, etc…
En estos espacios puedes dejar a tus hijos durante algunas horas para que se diviertan con actividades exclusivas para ellos.
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¿Vas con amigos o en pareja? El Quiet Cove es un área solo para adultos que es un must. Con una alberca exclusiva y jacuzzis con vista al mar puedes tomarte un drink en el Skyline Bar o probar todas las especialidades de café que puedas imaginar en el Cove Café. Además, hay diferentes bares con música en vivo, shows de stand-up o actividades como bingo, catas de vino o trivias de Disney cada noche, si necesitas un extra de relajación puedes agendar algún masaje o tratamiento en el Senses Spa.
Taste the Magic: cenas que inspiran
Una de las cosas más cool del Disney Dream es el concepto de cenas rotativas. Cada noche cenas en un restaurante distinto.
- Animator’s Palate: inspirado en el arte de la animación, este restaurante está lleno de pantallas que cobran vida durante la cena. Mickey aparece y los personajes interactúan contigo.
- Royal Palace: si alguna vez soñaste cenar como una princesa, este lugar lo hace realidad. Inspirado en Cenicienta, La Bella y la Bestia y Blancanieves, toda la decoración es de cuento; para los foodies es un must, con opciones como filet mignon, pato confitado o ravioles de langosta.
- Enchanted Garden: este restaurante cambia de iluminación mientras cenas, simulando un jardín que pasa del día a la noche. ¡Una experiencia visual única! Tiene opciones más ligeras como mariscos y ensaladas.
Existen restaurantes exclusivos para adultos donde puedes vivir una experiencia de fine dining (requieren reservación y tienen costo extra, pero lo valen al 100%). Palo ofrece cocina italiana con vista panorámica al mar, ideal para un date. Remy, inspirado en Ratatouille, presenta un menú francés de varios tiempos y maridaje, perfecto para celebrar algo especial. Y si después de todo eso te quedas con antojo, hay snacks 24/7: pizzas, helados, hamburguesas, tacos y miles de opciones en el restaurante buffet Cabbana, además de tener room service incluido (sí, leíste bien: incluido). ¡Un must son los churro waffles de Mickey, los mejores de tu vida!
Entretenimiento cada noche
Después de la cena, la cita es en el teatro principal del barco, un espacio espectacular que bien podría estar en Broadway. Cada noche hay una obra original y diferente, con escenografías y efectos especiales impactantes, canciones en vivo y esa mezcla única de nostalgia e innovación que solo Disney sabe hacer.
Pirates’ Night
La famosa Noche de Piratas es una experiencia de otro nivel. Todos (¡y sí, todos!) se visten como piratas, ¡y el barco entero se transforma con música y ambientación especial! La fiesta sigue en el deck con un show en vivo donde te encontrarás con el mismísimo Jack Sparrow, y que termina con fuegos artificiales sobre el mar (un fact importante es que los cruceros de Disney son los únicos en el mundo que tienen pirotecnia y que esta no contamina y se convierte en comida para peces).
Castaway Cay: el paraíso exclusivo de Disney
Y si pensabas que esto no podía mejorar… ¡Llega Castaway Cay, la isla privada de Disney en Las Bahamas y uno de los destinos durante el viaje! Es todo lo que soñaste en una playa: vistas increíbles, zonas para familias, toboganes, snorkeling, renta de bicis, parrilladas y hasta una playa solo para adultos, perfecta para desconectarte de verdad.
Entre cenas con personajes y sunsets de película, te vas dando cuenta de algo: Disney no es sólo un lugar, es una emoción, porque como bien dijo Walt: “Todos nuestros sueños pueden hacerse realidad si tenemos el valor de perseguirlos”. Y este viaje, sin duda, es uno de esos sueños que vale la pena vivir.
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