En un mundo donde el amor puede viralizarse más rápido que una pole position, Alexandra Saint Mleux ha logrado algo cada vez más raro: mantener el misterio. No canta, no actúa, no compite… y sin embargo, es imposible no preguntarnos todo sobre la novia de Charles Leclerc, el golden boy de Ferrari.
Discreta pero magnética, Saint Mleux pasó en cuestión de meses de ser una completa desconocida a protagonizar campañas de belleza, ser style icon de muchas y convertirse en la WAG de la F1 (wives and girlfriends) favorita de las cámaras en los eventos de Fórmula 1. Aquí todo sobre Alexandra…
Rise of an it girl
Hace nada, su perfil de Instagram era privado, con menos de mil seguidores. Hoy, tiene más de 1.3 millones de fans que la siguen por su estilo minimalista, su amor por el arte y, claro, por su vida a bordo de jets privados y yates mediterráneos. En 2024, se convirtió en imagen de Rhode Beauty, la marca fundada por Hailey Bieber, marcando su entrada formal al universo de la moda y la belleza.


Y aunque podríamos pensar que se trata de una influencer más con novio famoso, lo cierto es que Alexandra Saint Mleux no es producto del algoritmo, sino de ser una clásica WAG de la F1. Una fórmula que parece mucho más efectiva que cualquier estrategia digital tradicional.
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¿Quién es Alexandra Saint Mleux?
Nacida el 19 de junio de 2002, Saint Mleux tiene 22 años y es de Italia. Estudió Historia del Arte en la prestigiosa École du Louvre en París y trabajó como asistente en la casa de subastas Hôtel des Ventes de Monte-Carlo. Su vida giraba en torno a obras de arte, galerías y archivos curatoriales, muy lejos de los focos de la Fórmula 1.
De hecho, durante mucho tiempo tuvo una cuenta de Instagram dedicada exclusivamente a piezas de arte, exposiciones y recomendaciones visuales. Su estilo (tanto en moda como en redes) siempre ha sido sofisticado y muy aesthetic.
El romance con Charles Leclerc
Los rumores sobre su relación comenzaron en marzo de 2023, cuando fans notaron su presencia en el fondo de un TikTok grabado en la Paris Fashion Week. Poco después, Alexandra fue vista en el Gran Premio de Mónaco como invitada oficial de Ferrari, y en julio, la pareja hizo su debut público en Wimbledon, junto a Pierre Gasly y su novia Francisca “Kika” Gomes.
Desde entonces, no han faltado las apariciones juntos. Ha asistido a varios grandes premios, incluyendo el de Italia, México y Mónaco, siempre manteniéndose un paso atrás del caos mediático. En la gala del GP de Mónaco, compartió mesa con miembros de la familia real de Mónaco, consolidando su estatus dentro del exclusivo universo de la Fórmula 1.


Y aunque Alexandra no sube mucho con Leclerc, sí aparece de vez en cuando en las de él, sobre todo en contextos como vacaciones con amigos, cenas privadas, cumpleaños. Eso sí, hay un protagonista indiscutible en su perfil: Leo, el perro salchicha miniatura de pelo largo que adoptaron juntos en 2024 y que ya tiene sus propias apariciones en las redes, a bordo de barcos, en circuitos o echando la siesta con la mejor vista de Mónaco.
Con la fama, Alexandra tomó una página del manual de estilo de íconos como Hailey Bieber: en lugar de huir de la atención que vino con su relación, la usó a su favor. No se aprovechó ni se escondió—simplemente mostró su estilo y personalidad con tanta autenticidad que se convirtió en una it girl aspiracional. Ya no es solo una WAG más; es la novia del piloto de F1 guapo que todas quisiéramos ser. Y seamos honestas… ya no envidiamos a Alexandra, ahora envidiamos a Leclerc.
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