La Ciudad de México está inundada de restaurantes. Tenemos de todo: los clásicos de toda la vida como San Ángel Inn, los estrellados Michelin como Pujol y, claro, los de taco express tipo Los Panchos. Pero, ¿qué pasa cuando se te antoja comer cocina mexicana en un lugar rico, con onda, aesthetic y donde no tengas que estar parada en la banqueta o te topes a tu tía en la mesa de al lado? Ahí es donde entran los restaurantes mexicanos cool. Spots confiables, bonitos, con sazón y que sorprenden lo suficiente como para llevar a tu amigo extranjero y que salga diciendo: “¡qué joya escondida la que me llevaron a conocer!”.
¿Ni fonda ni Michelin? Estos restaurantes mexicanos son el sweet spot
Barra Lupe
Dónde: C. Orizaba 154, Roma Norte., Cuauhtémoc
Taquería, cantina, garnachería moderna… llámalo como quieras, pero aquí lo que reina son los tacos impresionantes y las tortillas recién hechas que saben a gloria. La carta se mueve entre el antojo y la tradición: prueba la tlayuda con cecina de Yecapixtla y chorizo (receta de la abuela Leticia), los tacos de lengua y guarda espacio para el buñuelo con helado.
El ambiente es entre taquería de barrio y cantina aesthetic, con cócteles bien pensados y branding impecable. Perfecto para redescubrir lo que ya amamos de la comida mexicana, solo más cool.
Casa Imperial
Dónde: Emilio Castelar & Galileo, Polanco IV Secc, Miguel Hidalgo
Un homenaje a la cocina tradicional mexicana en pleno Polanco. El concepto, creado por Grupo MYT, busca rescatar esas recetas que pasan de generación en generación, con sazón de mayoras y toda la nostalgia de los comales y molcajetes.
Aquí puedes desayunar, comer o cenar entre salones que parecen sacados de otra época, con un menú que celebra los ingredientes locales y las técnicas ancestrales. Es como comer en casa, pero con mucho estilo.
Comal Oculto
Dónde: Gob. Protasio Tagle 66A, San Miguel Chapultepec I Secc, Miguel Hidalgo
Este lugar es la prueba de que no necesitas un setting extravagante para comer increíble. Su ambiente relajado y su mesa comunal son parte del encanto: aquí se trata de convivir y compartir. La cocina mexicana de comal es la estrella y no por nada ya tienen un Bib Gourmand de la Guía Michelin, que reconoce lo rico y lo accesible. Ideal para ir en plan casual y terminar con una gran anécdota.
Lounge Fernando
Dónde: Iztaccihuatl 54, Hipódromo
En la planta baja del Hotel San Fernando, este restaurante-bar de vibes vintage mezcla coctelería de autor, música y comida mexicana con ingredientes frescos. El chef Oswaldo Toledo Ramírez creó una carta que se divide en botanas, entradas, fuertes y postres.
Te recomendamos empezar con el ceviche de camarón, seguir con la tostada de atún y rematar con los tacos de Rib Eye. Perfecto para un date o para arrancar una noche de fiesta con estilo.
Chapulín
Dónde: Campos Elíseos 218, Polanco
Ubicado dentro del Hotel InterContinental, Chapulín es un imperdible de Polanco. El chef José Luis Sánchez Ronquillo honra los sabores de México con ingredientes del mar y el campo en una cocina que combina mariscos frescos, brasas y antojitos de comal.
La experiencia empieza desde la barra fría de mariscos y sigue con platillos que no puedes dejar pasar: la tostada de atún aleta amarilla, el taco de jaiba enchilada con queso y, para cerrar con broche de oro, el aguachile mixto de callo de hacha.
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