*Spoilers* Por fin llegó el final de la segunda temporada de The Last of Us y, si esperabas respuestas definitivas, sorry… no las hubo. Lo que sí dejó clarísimo es que esta historia ni de cerca se acaba aquí.
El episodio 7 se sintió más como una pausa larga entre temporadas que como un cierre. Pero, con eso, nos dio varias pistas de hacia dónde va esta historia que ya nos tiene con el corazón hecho trizas.
Muertes, traiciones y un disparo al aire en el final de la temporada 2 de The Last of Us
Empecemos por lo obvio: sí, hubo muertes importantes. Primero, la de Owen y Mel, a quienes Ellie mata en el acuario. Lo más desgarrador es que Mel estaba embarazada, lo que deja a Ellie profundamente afectada (y a nosotros también).
La más fuerte, la de Jesse, que cayó en medio del caos cuando el grupo de Ellie fue emboscado en el teatro. ¿Lo más doloroso? Jesse había ido a Seattle solo para proteger a su gente, incluido su bebé. No merecía ese final.
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Y luego viene la gran escena de tensión: Ellie frente a Abby, con Tommy en la mira. La pantalla se pone negra justo después de un disparo, y no sabemos qué pasó. ¿Le dispararon a Ellie? ¿A Tommy? ¿A nadie? Es la pregunta con la que nos dejan colgadas hasta la siguiente temporada.
Spoiler (de los juegos): no, Ellie no muere. Al menos no todavía. Todo apunta a que el disparo no fue fatal, o incluso que pudo venir de alguien más. Lo que sí es claro es que su venganza no terminó, y Abby tampoco va a dejar las cosas así.
Un regreso inesperado al Día 1
Después del disparo y del fundido a negro, hay un giro que cambió toda la conversación: regresamos al Día 1 en Seattle, pero esta vez desde los ojos de Abby.
Este regreso no solo es un recurso estilístico. Es una promesa. Nos dice que la temporada 3 cambiará por completo de perspectiva y que ahora nos toca ver el mundo desde el otro lado. Así como en el videojuego The Last of Us Part II, la serie va a dividir su corazón: ya sufrimos con Ellie, ahora toca entender a Abby.
No es un cambio fácil. De hecho, fue lo que convirtió al videojuego en uno de los más polémicos de la década. Humanizar al “villano” no siempre es bien recibido. Pero si algo ha hecho bien esta serie es incomodarnos de la forma más honesta posible.
Abby, la nueva protagonista (y por qué vas a amarla/odiarla)
Cuando se confirmó que Kaitlyn Dever interpretaría a Abby, muchos fans aplaudieron, otros se quejaron, y todos sabíamos que venía algo fuerte. Abby no es simpática: es fuerte, fría, implacable, pero también es hija de un médico que Joel asesinó. Ella creció en guerra y, en esta temporada, apenas rascamos la superficie de lo que la mueve.
En la temporada 3, Abby probablemente será el centro emocional de la historia. La veremos en conflicto con Isaac, su líder en el WLF (interpretado por Jeffrey Wright), y en medio de una guerra total contra los Serafitas, una secta religiosa que vive en una isla cercana y que se está preparando para una batalla apocalíptica.
¿Será Abby la nueva “Ellie”? No. Pero sí será el corazón de una historia paralela, una que va a resonar de formas inesperadas.
Lo que viene: ¿qué sabemos de la temporada 3?
La serie fue renovada oficialmente en abril de 2025, incluso antes de que se estrenará la temporada 2. Eso quiere decir que los creadores Craig Mazin y Neil Druckmann ya están trabajando desde hace tiempo en los nuevos episodios.
Todo indica que la nueva temporada será la historia de Abby. Lo que ella hizo, lo que perdió, y lo que la llevó al teatro en ese momento clave. Mientras tanto, Ellie estará en segundo plano, al menos durante un tiempo. Pero su historia no ha terminado. Todavía hay muchas heridas abiertas, y muchas decisiones por tomar.
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