Puede que Emily Cooper tenga uno que otro look controversial pero si algo podemos acordar es que el look de Emily para el baile de máscaras en la nueva temporada de Emily in Paris es simplemente espectacular. Con un conjunto de rayas en blanco y negro que mezcla un catsuit con una falda, una capa enorme y un sombrero de ala ancha, es obvio que solo podía ser obra de Harris Reed y claro con inspo de la reina del glamour misma, Audrey Hepburn.
Lily Collins amó este espectacular vestido
Reed, el director creativo de Nina Ricci, conoció a Lily Collins, quien interpreta a Emily Cooper, en su primera semana en la marca en 2022 según le dijo a Vogue. “Lily vino a la oficina, y recuerdo que revisamos los archivos juntos, viendo todas esas rayas y esa paleta en blanco y negro,” cuenta Reed. Su primera colección para Nina Ricci, conocida por sus atrevidas rayas monocromáticas, le encantó a Collins de inmediato quien no dudó en compartir las imágenes con Marylin Fitoussi, la diseñadora de vestuario de Emily in Paris.
Collins no pudo evitar compartir su emoción en Instagram: “Un poco de conmoción por el vestido (…slash catsuit). Sin duda, mi disfraz favorito de la cuarta temporada, diseñado por mi querido amigo, el único e incomparable @harris_reed! Trabajar con Harris, el equipo de @ninaricci y @marylin.fitoussi fue un sueño hecho realidad. Desde que leí el guión, supe que solo Harris podía hacerlo. Cada detalle fue tan intencional, inspirado y tan Emily.”
El homenaje a Audrey Hepburn en Emily in Paris
Cuando le pidieron a Reed que creará un look para la cuarta temporada, tanto Fitoussi como Collins lo tenían clarísimo: querían algo que dejará una gran impresión. Se inspiraron en el famoso Baile Blanco y Negro, un evento de máscaras que tuvo lugar el 28 de noviembre de 1966 en el Hotel Plaza de Nueva York, organizado por Truman Capote. “La idea era hacer algo irónico y llamativo,” comenta Reed. Se basó en las formas atrevidas y estructuradas que llevaban las invitadas al baile de Capote, especialmente en un vestido de rayas blancas y negras que usó Amanda Carter Burden, hija de Babe Paley.
Pero lo que más destacó fue el parecido con el vestuario de la obra de Broadway My Fair Lady, evocando la imagen de Eliza Doolittle, interpretada por Audrey Hepburn. Esto fue aún más especial porque Lily Collins siempre ha sido comparada con Audrey Hepburn, no solo por su increíble parecido, sino porque Lily ha dicho que Audrey es una de sus actrices favoritas.
Y para rematar, en la segunda parte de la temporada 4, habrá otro guiño a Hepburn cuando Collins recree el look de esquí de la película Charade (1963), con ropa de piel sintética negra y un par de gafas de sol Pierre Marly de gran tamaño, que incluso consiguieron replicar a la perfección.
La influencia de Eliza Doolittle se nota en el diseño final. Reed tomó ese look clásico y le dio su propio toque para crear algo más moderno: un catsuit gráfico combinado con una capa dramática que le da un giro muy a la Emily. El sombrero elegante es un homenaje a los icónicos sombreros de Hepburn.
Para Reed, ver su primer diseño personalizado en pantalla es un sueño hecho realidad. “Es un momento surreal”, reflexiona. “Todo se dio de manera muy natural. Me identifiqué mucho con , siendo un británico-americano en París, siempre soñando en grande y haciendo las cosas a mi manera.” Al igual que Reed, Emily Cooper es un personaje que se atreve a seguir su propio camino, tanto en la moda como en la vida por lo que no es casualidad que juntos, han creado un look que es tan inolvidable y audaz como la misma Emily.
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